La curiosidad de un perro ha permitido descubrir y desactivar una granada de mortero en una finca de la localidad de Navahermosa, en Toledo.
Según ha relatado la Guardia Civil, cuyo equipo TEDAX se hizo cargo del artefacto explosivo y logró desactivarlo en una zona segura, el hallazgo se produjo cuando el can era paseado en una finca propiedad de su dueño, que fue el encargado de dar aviso a la Benemérita.
Los hechos ocurrieron el pasado día 13 de agosto, cuando este vecino de la localidad de Navahermosa se puso en contacto con la Guardia Civil para informar de que mientras paseaba con sus perros por el interior de su finca, ubicada cerca del embalse del Torcón, uno de ellos se puso a excavar y descubrió lo que podía tratarse de un artefacto explosivo.
Una patrulla se desplazó hasta el lugar y comprobó la existencia de dicho artefacto, por lo que tomaron las debidas medidas de seguridad y lo pusieron en conocimiento del Grupo de Especialistas en Desactivación de Artefactos Explosivos y NRBQ (GEDEX).
Posible detonación
Los especialistas verificaron que se trataba de una granada de mortero de 81 mm de calibre de la pasada Guerra Civil española y que contaba con todos los elementos necesarios para que pudiera detonar, con el consiguiente riesgo para las personas ante una manipulación inadecuada.
Estos agentes recogieron el artefacto y lo trasladaron a una zona segura donde procedieron a su destrucción.