Unos 13.000 vecinos de los 10 municipios que pertenecen a la mancomunidad de servicios de la Cabeza del Torcón, en Toledo, llevan sin poder consumir agua potable desde el jueves 4 de julio, debido a una inversión térmica en las aguas de su embalse.
Los pueblos afectados son Cuerva, Casas Buenas, Pulgar, Noez, Gálvez, Ventas, Menasalvas, San Pablo de los Mones, Totanés y San Martín de Montalbán, que en total suman unos 13.000 habitantes.
En declaraciones a EFE, la presidenta de la mancomunidad y alcaldesa de Cuerva, Montserrat Rojas, ha explicado que la calidad del agua se ha visto afectada por una diferencia entre la temperatura del embalse y la del exterior, lo que ha provocado que algunos valores del agua se hayan alterado.
"Por las noches, la temperatura del embalse baja a los 5 grados y si por las mañanas tenemos 40, ahí está el problema", ha detallado Rojas, al tiempo que ha asumido que la solución es esperar a que los valores se regulen, ya que no incide el factor humano.
Con todo, ha precisado que aunque el agua no es potable para consumo humano, sí pueden beberla los animales, teniendo en cuenta la importante cabaña ganadera de la zona.