El consejero de Sanidad de Castilla-La Mancha, Jesús Fernández Sanz, ha anunciado este martes el inicio de las obras de instalación de "la última fase del servicio de oncología y radioterapia del Hospital de Toledo".
Según ha expuesto Fernández Sanz, esta última fase consistirá en la instalación de un servicio de braquiterapia anunciado el pasado mes de octubre "con una inversión de 500.000 euros". Una vez concluidas estas obras de instalación en las próximas semanas, "quedaría cerrada toda la tecnología necesaria para el servicio de oncología de Toledo".
El consejero ha señalado que la braquiterapia, consistente en "la introducción de fuentes radiactivas aprovechando las cavidades naturales", supondrá una incorporación fundamental a los servicios oncológicos del centro hospitalario de Toledo.
Fernández Sanz ha reivindicado el esfuerzo para dotar de servicios oncológicos a esta área sanitaria, no solo con la introducción de tecnología, sino a través de "un aumento del 70% de la plantilla".
Además, ha destacado el avance a nivel regional en la instalación de medios para hacer frente al cáncer, planteando que la región pasará a contar con "servicios de radioterapia en las cinco provincias", ya que, además de la instalación de estos recursos en Toledo, "también están comprados los aparatos para Guadalajara y Cuenca". "En 2015, cuando llegamos, contábamos con este tipo de instalaciones tan solo en Albacete y Ciudad Real", ha señalado.
Centro de salud de Manzanares II
El consejero de Sanidad también ha anunciado la adjudicación de las obras del nuevo Centro de Salud Manzanares II en Manzanares (Ciudad Real).
La construcción de este nuevo centro de salud, anunciada el pasado mes de diciembre y con un presupuesto de 3,7 millones de euros, ha sido adjudicada a la empresa Assistacasa SL.
La concesionaria contará con un mes para iniciar las obras a partir del próximo 18 de mayo, así como un plazo de 24 meses para la conclusión de las mismas.
Fernández Sanz ha recordado que el nuevo centro de salud, ubicado entre las calles María Zambrano y la calle de La Prensa, contará con 2.000 metros cuadrados en una sola planta y albergará "siete consultas de medicina de familia, siete consultas de enfermería, dos consultas de médico pediatra, dos consultas de enfermería de pediatría", así como otros espacios como un área de extracciones o un área de rehabilitación.
Programa de retención del talento
De otro lado, el consejero de Sanidad se ha referido este martes a la puesta en marcha del Programa Regional de Perspectiva Contractual y Retención del Talento en el ámbito sanitario, cuya aprobación se publicó el pasado viernes, a través del cual se persigue retener en el sistema público sanitario de la región a los 450 residentes que concluyen su especialización este año.
Según ha expuesto el consejero, con este proyecto "las 450 personas que terminan sus prácticas en mayo van a tener una oferta encima de la mesa para quedarse con nosotros los próximos tres años".
Fernández Sanz ha hecho especial hincapié en la importancia de establecer medidas para "la retención de talento" para hacer frente a "las jubilaciones y el incremento de plantilla" que precisa la sanidad regional.
"La falta de profesionales es una de las cuestiones que estamos abordando, yo diría que a nivel nacional, y en Castilla-La Mancha estamos muy encima de ello", ha planteado el consejero.
En este sentido, ha señalado que los planes de incorporación de internos residentes de todos los ámbitos sanitarios comenzaron en el año 2020, con el establecimiento de ofertas de un año, que se ampliaron a dos años en 2021 y, finalmente, a tres en 2022. "En este caso la novedad es que es al cien por cien en todas las categorías", ha señalado.
El consejero de Sanidad ha reivindicado el avance en la Comunidad en materia de retención de talento, afirmando que Castilla-La Mancha ha pasado a "ser una comunidad atractiva" para los profesionales.
"De todos los que terminaron el año pasado la especialidad en nuestra región, el 72% decidieron quedarse", ha afirmado en este sentido. "Este año, con este plan, aspiramos al 80%", ha añadido.
Asimismo, ha planteado que el programa no será el único mecanismo para incrementar la plantilla de personal en la sanidad castellano-manchega, ya que la Administración regional no se cierra a la incorporación de más personal sanitario que no haya realizado su especialización en la región.