El alcalde de Guadalajara, Alberto Rojo, ha celebrado este viernes la denegación por parte del Gobierno de Castilla-La Mancha de la autorización de una planta de residuos industriales en terrenos de la capital porque a su juicio "ese vertedero nunca fue" su proyecto y "nunca lo será".
Tras publicar este jueves el Diario Oficial de Castilla-La Mancha una resolución por la cual se deniega la autorización de este complejo de residuos al considerar que podría afectar a las águilas imperiales que habitan la zona, el regidor, en declaraciones a Europa Press, ha mostrado su respeto por la decisión adoptada por el Gobierno regional y ha recordado que fue proyecto del que fuera alcalde de Guadalajara, Antonio Román, "quien en su momento firmó un convenio para promoverlo a cambio de un ingreso de 450.00 euros en las arcas municipales".
"Lo dije y lo mantengo, ese vertedero nunca ha sido mi proyecto y nunca y lo será", ha insistido el regidor, a la par que ha manifestado que no solo respeta la decisión técnica adoptada por la autoridad ambiental sino que la "celebra y comparte".
El alcalde de la capital alcarreña ha recordado nuevamente que una vez que salió a la luz este asunto el pasado marzo su equipo de Gobierno nada podía hacer pues el asunto estaba ya en manos de los técnicos.
No obstante, no ha querido dejar pasar por alto cómo, pese a que a raíz de este asunto otros ayuntamientos "se han mostrado dispuestos a coger la pancarta" e incluso le pidiesen "poco más o menos que prevaricase", en su momento pudieron alegar contra este proyecto y no lo hicieron, ha precisado a Europa Press.
Final de la historia
En todo caso, Rojo ha subrayado que lo importante ahora es que "se puede celebrar que el proyecto del vertedero va llegando a su fin" así como que "en el final de esta historia se tiene que escribir que el Partido Popular lo promovió y que el resto de municipios afectados, la mayoría de la formación 'popular', no presentaron ni una sola alegación al respecto".
El regidor de la capital ha subrayado igualmente que, aunque la crisis del coronavirus lo ha parado todo, espera poder iniciar cuanto antes una modificación urbanística "para que sea imposible realizar este proyecto en esos terrenos".
"La promoveremos ahora que no hay viabilidad ambiental porque ahora es cuando no prevaricamos", ha concluido el alcalde, tras recordar que han sido los propios técnicos del Gobierno regional los que han considerado que estos terrenos no reúnen las condiciones adecuadas para que una empresa privada instale un vertedero en el término municipal.