Emoción, historia y estruendo. Es lo que ha vivido el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, al asistir este lunes a la Batalla de versos y pólvora por el Santo Niño de las Fiestas de Moros y Cristianos de Valverde de Júcar, una localidad conquense que vive el 8 de enero esta antigua tradición de siglos con gran devoción.

El tremendo ruido de la pólvora de la batalla es una de las notas características de esta fiesta que se remonta a 1496 y que obliga a los asistentes a llevar tapones para soportar el estruendo de las armas. El propio Page tuvo que protegerse los oídos frente al estallido, pero después ha reconocido que fue un día "muy emocionante" y que le gustó mucho acompañar a los valverdeños en su Fiesta den Santo Niño.

"Ayer fue muy emocionante acompañar a los valverdeños en su devoción por la Fiesta del Santo Niño. Esta festividad tan arraigada, con semejante despliegue de "dichos" y pólvora, es un preciado legado. Mantenerla es preservar nuestra historia", ha escrito este martes en las redes sociales el presidente de Castilla-La Mancha.

Las Fiestas de Moros y Cristianos de Valverde se celebran del 5 al 10 de enero y tienen una antigüedad de más de cinco siglos, según informa la web oficial de Turismo de Castilla-La Mancha.

Desde 1496, la Plaza de la Verdura de Valverde de Júcar ve comenzar la fiesta con un sobrecogedor silencio. El que precede al Primer Encuentro: batalla de moros y cristianos, perfectamente caracterizados, por la posesión de la imagen del Santo NIño, en la que vencen los segundos. Alardes, pullas y burlas de viva voz entre los contendientes.

En la calle de San Marcos tiene lugar el Segundo Encuentro, con derrota de los cristianos y estruendo de pólvora. En el Tercer Encuentro se escenifica el arrepentimiento del general moro, y el abrazo del perdón del cristiano. Después, una vez celebrada la misa, el general cristiano da la tradicional arenga al pueblo, se realiza el correr de banderas, y el atronador estruendo de las salvas con que termina el acto.

Los Dichos

El día 6, día de Reyes, a las 12:00 horas tiene lugar la concentración en la Plaza Mayor para sacar en procesión al Santo Niño, hecho obligatorio, según la tradición, por parte de las Compañías. El día 7 de enero, es el día de las Guerrillas, a las 10:30 horas la oficialidad de cada compañía, por separado, se reúne en casa de su respectivo General para tomar el aguardiente y los higos en el domicilio de los oficiales. Ese mismo día a las 15:30 horas se celebran las 'Vísperas del Niño’.

Y el día 8 es la Batalla de versos y pólvora del Santo Niño en la que Page ha participado este año. Se recoge al "dichero", al que se honra como si fuera general, y se acude a la Plaza Mayor para entonar "Los Dichos", divididos en los tres encuentros citados.

La tradición oral menciona que, por la intercesión del Santo Niño, el conde de Alarcón (señor del pueblo) se salvó de una emboscada. Desde entonces, el Santo Niño ha sido el honor y honra del pueblo y el centro de esta festividad tan arraigada. El conde murió en batalla en 1491-1492 y, su hermano, trajo consigo su cuerpo a la villa de Valverde 4 de enero de 1496, informa la web Los Ojos del Júcar.