Los 18.000 habitantes de Daimiel (Ciudad Real) ha estado a punto de quedarse sin agua corriente por el robo de cable y bobinas de cobre sufrido en la instalación municipal donde se encuentran los pozos de captación.
Según ha informado el Ayuntamiento daimieleño, a las 19:30 horas del pasado miércoles, la alarma de esta instalación en los Ojos del Guadiana detectó una intrusión. Al llegar al lugar, el personal de la empresa Aquona comprobó que el transformador principal había sido destrozado y se habían llevado parte de las magueras de cobre.
María García Rogado, gerente de la empresa en Ciudad Real, aseguraba que rápidamente se pusieron manos a la obra para "encontrar un transformador de sustitución" que permitió a la instalación volver a estar operativa a las 0:30 horas. Gracias a esta rápida actuación, los vecinos de Daimiel no sufrieron problema alguno de abastecimiento.
García Rogado indicaba que Aquona ya ha puesto la denuncia en la Guardia Civil, que también se personó en las instalaciones tras conocer los hechos. Además, durante este jueves la Policía Científica inspeccionó el lugar en busca de pistas que ayuden a esclarecer el robo.
El concejal de Ciclo Hidráulico de Daimiel, Jesús Villar, ha trasladado la felicitación y el agradecimiento del Ayuntamiento por la diligente intervención de la empresa tras el incidente. "Fue un susto y un disgusto, pero en apenas cinco horas, en un tiempo récord, se solucionó un problema que podría haber sido bastante serio. Eso hay que agradecérselo a la gerente y a todos los empleados que se pusieron manos a la obra", destacaba.