La alcaldesa de Ciudad Real, Pilar Zamora, y el concejal de Movilidad, David Serrano, han visitado este jueves la evolución de las obras de peatonalización de las calles Toledo, Calatrava, Feria y Caballeros, en las que el Ayuntamiento de Ciudad Real está invirtiendo 735.000 euros, y que se espera puedan estar terminadas para finales del mes de enero o febrero del año que viene.
La empresa Proimancha es la encargada de ejecutar estas obras, que permitirán que haya una plataforma única accesible para todos, para que la movilidad sea segura a lo largo de todo el trazado desde la calle de la Rosa, hasta la calle Paloma a través de la calle Calatrava y hasta la calle Caballero por la calle Feria, según ha informado el Consistorio en nota de prensa.
"Estamos cambiando el centro de la ciudad, y estamos haciendo que Ciudad Real tenga elementos distintivos que cumplen con todos los objetivos que nos marcamos como Equipo de Gobierno: derechos iguales para todas las personas, y que no haya barreras arquitectónicas, por lo que todas las obras tienen que ser accesibles. Además estamos apostando por el medio ambiente, por la hostelería y por el pequeño comercio", ha comentado Zamora.
La primer edil ha pedido disculpas por las molestias que se han ocasionado por estas obras, pero ha reconocido que cuando acaben, la zona será "un espacio vivo, dinámico". "Será una nueva zona de esparcimiento de la ciudad y es una peatonalización para conseguir día a día la ciudad que queremos: para todos para todas, medioambientalmente sostenible y revitalizando la ciudad", ha manifestado.
Mientras, Alberto Samper, ingeniero del área de Movilidad, ha señalado que el Ayuntamiento "está apostando por la sostenibilidad en todas las obras que está acometiendo, y políticas de movilidad centradas en las personas". "Así se pone al peatón en el centro de toda la actuación para que la movilidad de todas las personas se pueda realizar de forma segura y accesible, y se ponen en valor los lugares emblemáticos de estas calles, como el Palacio de la Diputación, el Museo Elisa Cendrero o la Plaza de la Merced, con espacios acogedores y donde la gente pueda reunirse", ha detallado.
Una obra que ha contado con el apoyo de la ONCE para cumplir con las normativas en materia de accesibilidad y movilidad, a las que se ha añadido algunas acciones complementarias, como bandas abotonadas que delimitan el borde de la calzada, o puntos de cruce específicos para que las personas con discapacidad visual no tengan problemas para transitar y cruzar.
Como novedad, en las antiguas bandas de aparcamiento se ha instalado un pavimento drenante verde, una sistema de drenaje sostenible que recoge el agua en periodos de lluvias muy intensas y que es la primera vez que se utiliza en Ciudad Real, como también los pavimentos con adoquines ecológicos. Se trata de unos adoquines confeccionados con hormigón reciclado y dióxido de titanio que al entrar en contacto con la luz solar, degrada los contaminantes atmosféricos que hay en el aire, principalmente las emisiones de los vehículos.
También se ha sustituido todo el saneamiento, con técnicas novedosas en la calle Calatrava, donde se llevará a cabo una nueva iluminación que corrija la iluminación deficitaria con la que contaba. Se renovará el arbolado, y toda la jardinería de las calles, a través de alcorques floridos, y se sustituirá el mobiliario urbano por otro adaptado para que lo utilicen todo tipo de personas.