Sorprendentes y llamativas declaraciones este lunes en Albacete del presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, sobre las empresas "atrapa contratos" y el daño que están haciendo en Castilla-La Mancha y en las obras públicas de la comunidad. Con una claridad contundente, el líder regional ha ofrecido algunos datos de interés sobre este asunto y ha anunciado que el Gobierno regional se plantea estudiar fórmulas legales para "terminar de inhabilitar" a las empresas que "trampean", a las que ha denominado "atrapa concesiones" y "atrapa contratos", y de las que ha denunciado una actitud "torticera".
García-Page no ha ocultado su malestar por esta situación y ha dicho que Castilla-La Mancha lleva ya más de 30 obras en proceso de "paralización o reversión" porque las empresas adjudicatarias "miran para otro lado", ha dicho. Este tipo de empresas, según el presidente regional, "nos dejan entrampados" y dejan paralizados proyectos de obras públicas, ha lamentado el líder castellano-manchego, molesto por esta situación que afecta tanto a la Administración autonómica como a los ayuntamientos y diputaciones.
García-Page ha aprovechado la inauguración de las nuevas instalaciones del Parque Científico y Tecnológico de Castilla-La Mancha en Albacete para ofrecer estos datos y hacer una valoración sobre estas empresas que no ha pasado desapercibida.
"La gente piensa que la Administración tiene tal nivel de burocracia, que somos un incordio", pero, a juicio del presidente, que la Administración tenga burocracia "no es lo más grave", sino cuando esa burocracia "la utilizan empresas para, torticeramente, acaparar contratos que luego no cumplen".
Un problema muy serio
Según ha recalcado, el presidente "esto es un problema muy serio" porque a los alcaldes, a los presidentes de Diputación, a todos, "la gente nos reclama que llevemos adelante nuestros compromisos, ponemos el dinero y, francamente, a la hora de la verdad hay muchas dificultades de gente que son atrapa concesiones y atrapa contratos", ha avisado.
García-Page opina que la legislación tiene que prevenir de ese tipo de fenómenos que "lo único que hacen es complicarnos la vida a todos". Por ello, no descarta "en un momento determinado" estudiar "una fórmula para terminar de inhabilitar a todas las empresas que, de forma recurrente, nos dejan entrampados", ha abundado.
Así, ha puesto como ejemplo un centro de educación que ya tenía que estar en marcha en Albacete desde hace tiempo y que, según ha asegurado, "nos está costando dios y ayuda". No obstante, ha enviado un mensaje de optimismo y ha garantizado que el centro irá para adelante y se irá por una solución de urgencia a una adjudicación para que entre en obras en los próximos meses.
"Es normal que la gente adjudique la culpa a la Administración y a los gobiernos, pero -ha advertido García-Page- luchamos en medio de una selva verdaderamente enorme de dificultades".