Tras un duro discurso del presidente de Rusia, Vladimir Putin, anunciando una operación militar especial en la región del Donbás esta madrugada, comenzaba el ataque masivo de sus fuerzas armadas contra Ucrania. Las alarmas ya sonaban en varias ciudades advirtiendo del ataque inminente e instantes después se escuchaban las primeras explosiones en Kiev, Jarkov, Odesa, Kramatorsk e Ivano Frankvist, al oeste del país. La guerra había empezado.
"Ha sido como si sonara el despertador a las cinco de la mañana, pero en forma de bombardeo", relata Olena Klyuch, una ucraniana que vive en Albacete desde hace 19 años pero que sigue en constante contacto con sus familiares. "He hablado con ellos en cuanto me he despertado y me han dicho que ya ha empezado el caos en las principales ciudades. Todos están comprando comida y medicamentos para quedarse el máximo tiempo en casa sin tener que salir y están muy preocupados. Es el verdadero comienzo de una guerra".
Colapso en las carreteras
Según cuenta Olena, las tropas rusas "están intentando destruir los grandes aeropuertos para que la gente no pueda salir" y "las carreteras están colapsadas porque muchas personas ya han empezado a huir". Sin embargo, su familia tiene claro que no abandonará el país. "No se quieren ir de allí porque piensan que si todo el mundo lo hace, nadie denfenderá ni salvará a Ucrania. Tengo muchos amigos que se han prestado voluntarios para acudir al frente".
Olena, que todavía sigue en estado de shock, reconoce que "aunque en Ucrania todo el mundo sabe de lo que es capaz Putin, nadie pensaba que los rusos le iban a permitir llegar a este punto". "Todos pensábamos que se iba a solucionar de forma pacífica porque nadie en su sano juicio empezaría una guerra en pleno siglo XXI, pero está claro que él si. Es como Hitler", dice. Aun así, espera que el resto del mundo "le pare los pies" y no le deje avanzar. "Ucrania sola no puede con Rusia porque es mucho más grande y poderosa. Necesitamos ayuda".
Para Olena, Putin es "como un okupa que viene a invadir tu casa y al que no puedes echar", pero no entiende cuáles son sus intenciones. "Esta mañana me ha preguntado mi hijo de 8 años que por qué estaban bombardeando Ucrania y no he sabido qué responderle. No hay un por qué", admite. "Nosotros no hacemos el mal nadie y vivimos felizmente, así que no entiendo qué quiere".
Sin asimilar todavía la noticia se encuentra también Yegor Yegorov, nacido en Kiev y empadronado en Ciudad Real desde 2015. "Todo ha cambiado radicalmente. Hasta hace dos días nadie pensaba que habría una guerra", relata.
"Hay explosiones en todos lados"
Según cuenta Yegor, que ha llamado a su familia en cuanto se ha despertado, "a las cuatro o cinco de la mañana han empezado a bombardear y ha sonado un aviso informando de cómo actuar". "Mis familiares han entrado en pánico, pero ahora mismo no pueden moverse de allí porque hay explosiones en todos lados. Son 2.000 kilómetros de frontera y el ejército ruso va a entrar por todos los puntos".
Yegor cree que "ahora mismo no tiene sentido huir porque los aeropuertos están cerrados y las carreteras llenas". Sin embargo, según le han contado, "hay muchas familias con niños pequeños que están yendo hacia la frontera de Polonia para salir". "Está empezando el caos. Todo el mundo está saliendo a los cajeros para sacar dinero y a las gasolineras para repostar. También me han dicho que mucha gente está cogiendo la maletas para intentar ir a otros sitios".
El ucraniano cree que es "imposible predecir lo que va a ocurrir", pero espera que Europa y la OTAN ayuden a su país y que la situación no empeore. "Ya hemos visto que no se puede poner una solución por la vía diplomática, pero hay que hacer algo cuanto antes".
Castilla-La Mancha, a disposición del Gobierno
El Gobierno de Castilla-La Mancha se ha puesto a disposición del Gobierno de España para acoger a refugiados ucranianos si fuera necesario. Ha sido la consejera de Bienestar Social, Bárbara García Torijano, la que ha explicado que la Junta "siempre responde" en cuestiones como esta. "Nosotros estamos a disposición del Gobierno de España para lo que, como siempre, nos indique y a la expectativa de lo que pudiera pasar", ha asegurado.
Por su parte, la organización Accem en Castilla-La Mancha también ha mostrado su disposición a acoger al mayor número de gente que pueda llegar a España en caso de que se organice algún dispositivo con motivo de la invasión rusa de Ucrania y "fuera necesario".
Así lo ha avanzado el responsable de esta organización a nivel regional, Braulio Carlés, que ha puesto de manifiesto su máxima solidaridad y disponibilidad de los distintos centros que tiene la organización repartidos por la región, entre ellos varios en Guadalajara, en el caso que hiciera falta. "Es la actitud que tuvimos con los afganos y la que tendremos con los ucranianos si hace falta", ha indicado.
Además, PSOE y PP de Castilla-La Mancha han condenado este jueves el ataque mostrando mostrado su solidaridad con el pueblo ucraniano y confiando en que la Unión Europea y EEUU puedan reconducir la situación. En sendas ruedas de prensa, la secretaria general del PP en Castilla-La Mancha, Carolina Agudo, y la portavoz del PSOE en las Cortes, Ana Isabel Abengózar, han mostrado la condena de sus partidos a esta agresión.
Cabe destacar que de los más de 112.000 ucranianos que residen en España, en Castilla-La Mancha viven 3.947, según los datos del Instituto Nacional de Estadística (INE) correspondientes a 2021.