Aprender las técnicas de apuntalamiento en situaciones de emergencia para evitar que edificios, terraplenes o zonas en peligro de derrumbe puedan venirse abajo poniendo en riesgo vidas humanas, ha sido el objetivo principal del curso que se ha llevado a cabo recientemente en la Escuela de Protección Ciudadana de Catilla-La Mancha, organismo dependiente de la Consejería de Hacienda y Administraciones Públicas.
Un total de 20 integrantes de los cuerpos de salvamento, extinción y rescate de diversos parques de la Comunidad Autónoma han participado en esta acción formativa, con el fin de poder hacer frente a todas aquellas situaciones de emergencia en las cuales el derrumbe de estructuras pueda suponer un peligro.
En este sentido, los participantes han tenido que aplicar técnicas de apeos y entibación de estructuras, en función de las necesidades del terreno y de los supuestos riesgos de derrumbe que presentaban los edificios y terraplenes propuestos en los ejercicios.
También los miembros de los grupos de extinción y rescate presentes en el curso han aprendido la secuencia de acciones a llevar a cabo ante situaciones de riesgo inminente de derrumbe, con el fin de interiorizar un sistema lógico de intervención. Una enseñanza que ha ido pareja con el manejo de las herramientas necesarias, así como la creación de los apuntalamientos y embridados.
Una parte importante de esta formación ha sido aprender la correcta evaluación del incidente en el que se pretende actuar, zonificando el entorno, planificando los rescates rápidos y valorando convenientemente las necesidades del trabajo a realizar.
Por último, y no menos importante, los monitores y especialistas del curso, procedentes del parque de bomberos del Ayuntamiento de Albacete, han insistido en la enseñanza de las medidas de prevención de riesgos laborales, que en todo momento deben observar los intervinientes en este tipo de emergencias para salvaguardar su propia integridad física.
De los 20 bomberos que han participado en este curso de formación continua llevado a cabo por la Escuela de Protección Ciudadana, 13 proceden de la provincia de Toledo, concretamente de los parques municipales de Talavera de la Reina, Ocaña y la capital regional, así como del Consorcio provincial; cuatro de la provincia de Albacete, tanto de la propia capital como de los parques provinciales; dos del Servicio Municipal de Extinción del Ayuntamiento de Guadalajara y uno del Consorcio provincial de Cuenca.