Un cuadro estadístico sobre las recetas expedidas en Castilla-La Mancha a personas procedentes de otras regiones en los meses de marzo y abril de 2020 comparados con los de 2019 revela la espectacular movilidad de gente de Madrid a nuestra región durante la crisis sanitaria del coronavirus.
El Gobierno de Castilla-La Mancha mantiene que el alto porcentaje de contagiados y muertos por coronavirus en la región se debe en gran parte a la proximidad a Madrid y a que durante los momentos previos a la declaración del estado de alarma, y más aún en los dos meses posteriores que han pasado desde entonces, se ha producido una llegada masiva de madrileños a las provincias castellano-manchegas. Los datos referidos a las recetas de farmacia que se dispensaron durante los meses de febrero, marzo y abril avalan la suposición del Gobierno de Emiliano García-Page.
Las recetas subieron respecto a las personas procedentes de todas las regiones, excepto de Cataluña. En el resto de los casos como Extremadura, Castilla y León o Murcia subieron invariablemente, aunque no alcanzaron cifras tan espectaculares como en el caso de Valencia y, sobre todo, Madrid.
Mientras en marzo de 2019 las recetas a personas procedentes de Madrid fueron 15.457, en marzo de 2020 han sido de 153.997. Y en abril, respecto al año pasado, se multiplicaron casi por cuatro, alcanzando la cifra de 197.790. Ya en febrero, las recetas a madrileños fueron de 68.692, cuando aún no se había declarado el estado de alarma y no era tan evidente el problema sanitario que se nos venía encima.
También ha crecido de forma evidente en estos meses el número de recetas dispensadas a personas procedentes de la Comunidad Valenciana, aunque sin llegar a la altura de Madrid. En marzo de 2019 se facilitaron 5.282 recetas a valencianos. En marzo de 2020 casi se han triplicado. Y algo similar ha ocurrido en abril.
En total, Castilla-La Mancha ha expedido más de 400.000 recetas durante marzo y abril a personas procedentes de otras autonomías, habiendo crecido en un gran porcentaje respecto al año pasado. Lo que resulta más asombroso es que a pesar de los controles impuestos por el estado de alarma y de los avisos repetidos a la población se haya incrementado el número de "viajeros" de Madrid a Castilla-La Mancha en el mes de abril, lo cual ha contribuido sin duda a que los datos de contagios y muertes presenten en nuestra región una de las peores caras de toda España.