La ley es clara. Los ayuntamientos tienen la capacidad de retirar y achatarrar vehículos aparcados en sus calles cuando permanezcan estacionados en un mismo punto de la vía pública por un plazo superior a un mes y presenten desperfectos que hagan imposible su desplazamiento por sus propios medios o le falten las placas de matrícula o cuando se encuentren en el depósito municipal por un plazo superior a dos meses.
Y en Azuqueca de Henares (Guadalajara) así lo han hecho, procediendo al achatarramiento de un total de 35 vehículos abandonados que se encontraban estacionados en la vía pública o habían sido trasladados al depósito municipal.
"Tal y como establece la ley, desde el Ayuntamiento se avisó a las personas titulares para que procedieran a la retirada inmediata de estos vehículos, que no se habían movido desde hace mucho tiempo. Una vez cumplidos los plazos marcados reglamentariamente, se han trasladado a un Centro Autorizado de Tratamiento para su destrucción aquellos que no han sido retirados", ha explicado el concejal de Seguridad Ciudadana, Antonio Expósito.
Pero estos 35 vehículos no van a ser los últimos. "En estos momentos, se encuentran abiertos 40 expedientes de abandono y, una vez que se vayan cumpliendo los plazos establecidos, se procederá a su achatarramiento", ha añadido el edil, que ha recordado que cuando la Policía Local inicia un expediente de abandono no se 'olvidan' las posibles infracciones en que hayan podido incurrir los propietarios.
Tal y como ha recordado Expósito, "la calle no es un desguace y estos comportamientos son un molestia que genera suciedad, provoca inseguridad y ensucia la imagen de la zona, además de provocar un problema medioambiental, ya que este tipo de residuos requieren un tratamiento controlado y adecuado, y, asimismo, causa molestias, en especial en las zonas donde el aparcamiento es difícil, al ocupar plazas de estacionamiento".