El único concejal del PSOE en el ayuntamiento de la localidad conquense de Villar de Cañas se abstuvo en la votación llevada a cabo en el último pleno municipal sobre una iniciativa para presentar alegaciones al nuevo Plan de Gestión de Residuos Radioactivos y reivindicarse como sede del ATC de residuos nucleares y de su Centro Tecnológico Asociado.
Algunos han interpretado que dicho concejal, el periodista Javier Semprún, no se opone al ATC, pero la realidad es que tampoco es partidario de su construcción en Villar de Cañas y entiende, además, que dadas las circunstancias será muy difícil que llegue a construirse. Semprún fue durante años director adjunto del grupo El Día y en la actualidad presta sus servicios como asesor de Presidencia del Gobierno de Page en el Palacio de Fuensalida. Su único vínculo con Villar de Cañas era el hecho de ser conquense y en las últimas municipales asumió la dura tarea de ir en la candidatura del PSOE en una localidad donde barre literalmente el PP. Ahora su vínculo es mayor como concejal, el único en la oposición.
Él mismo, según ha contado a Efe, presentó una moción en la que invitaba al ayuntamiento a “trabajar por una alternativa ante la enorme posibilidad de que el ATC, finalmente, no se construya” en Villar de Cañas. Fue rechazada. Seguidamente se trató la moción del PP, que se había presentado por vía de urgencia, y fue aprobada con el voto a favor de los seis ediles “populares” y la abstención de Semprún.
El periodista y concejal entiende que el ayuntamiento "siga defendiendo su posición" en defensa del ATC, pero cree que conviene contemplar "un nuevo escenario" en el cual se trabaje con las administraciones, la UCLM y Enresa para que "lo construido no caiga definitivamente en desuso y se plantee el aprovechamiento de los edificios".
"Soy plenamente consciente del sentimiento de los vecinos de esta localidad por el proyecto", ha señalado Semprún, que sin embargo ha apuntado que en el borrador del séptimo Plan General de Residuos Radiactivos solo se menciona una vez a la localidad, "en los hechos del pasado", y ha añadido que, aunque se mantiene la necesidad de un ATC, se aplaza su construcción y no se insiste en la ubicación actual.
Por ello, considera oportuno "trabajar desde ya" la posible definitiva paralización de esta construcción y ha lamentado la actitud que a su entender mantiene el PP y que se refleja en el "negarse a trabajar con varios escenarios posibles, y fiarlo todo a un cambio general en los diversos procesos electorales de los próximos años, así como a repetir los argumentos ya conocidos".
Ha explicado asimismo sobre su abstención en la votación que "Villar de Cañas necesita la recuperación del diálogo, el trabajo y colaboración con todas las administraciones, y un análisis profundo de los diferentes escenarios que pueden tener que ser afrontados".
El proyecto del ATC en Villar de Cañas, ahora paralizado, había creado gran expectación e ilusión en la localidad y en pueblos próximos porque suponía introducir un elemento dinamizador del empleo y la economía en una zona despoblada y deprimida. Los vecinos, con el alcalde a la cabeza, siguen creyendo en el proyecto y confían en que un cambio de signo político en los gobiernos central y regional podrá recuperarlo y ponerlo en marcha de nuevo.