Puede parecer lo contrario, como insiste el PSOE, pero el equipo electoral de Alberto Núñez Feijóo, presidente nacional del PP, ha subrayado como "prioritario" el objetivo de ganar las elecciones autonómicas de mayo en Castilla-La Mancha y colocar a Paco Núñez en la Presidencia de la Junta. Un sueño difícil, no imposible, sobre el que insisten desde Génova con sus encuestas internas en la mano y con la firme intención de evidenciar que el desalojo de Emiliano García-Page del poder está al alcance de sus posibilidades reales. El cálculo parece altamente optimista, incluso fuera de la realidad para algunos analistas, pero la voluntad de Feijóo de teñir de azul el mapa de Castilla-La Mancha es un hecho que se ha instalado en los despachos de los populares. Y van a ir a por ello.

Génova basa sus expectativas en sus datos demoscópicos, en el tirón del propio Feijóo, que está por delante de los socialistas en todas las encuestas, y en la "creciente" popularidad de un Paco Núñez del que cuentan que está cada día más convencido de su ascenso al poder autonómico en el Palacio de Fuensalida. La ilusión se le ha encendido como nunca al equipo de Núñez en Castilla-La Mancha, que ha empezado el 2023 con la vitola del "año del cambio" como un "sueño posible y probable". Es obvio que, más allá de los deseos de los populares, el PSOE de Page se toma en serio esta hipótesis y, aunque quiere parecerlo, no sólo no menosprecia a Núñez como rival, sino que está muy pendiente de todos sus movimientos e intenta a diario desmontarlo como candidato y líder de la oposición regional.

Sea como sea, y al margen de lo que termine pasando en mayo, la clave de este "impulso de voluntad" del PP está en el simbolismo que tendría para este partido, y personalmente para Feijóo, el azul del mapa castellano-manchego en la noche electoral del 28 de mayo. Un mapa grande, vistoso, con fuerza, en toda la zona centro de España formando un "espacio de centro derecha" junto con la Comunidad de Madrid de Isabel Díaz Ayuso, Castilla y León y la Andalucía de Juanma Moreno Bonilla. Esa "foto azul" es un deseo creciente en el equipo electoral del PP y el eje de la apuesta por un Paco Núñez que, aunque con un rival realmente complicado como Page, cree salir a jugar este partido con un "mejor pronóstico" del que pudiera parecer. Este mensaje, destinado también a desalentar a los socialistas, va a formar parte de la estrategia del PP, cuyos dirigentes nacionales parten con la intención de volcarse con Núñez a partir de ya y a lo largo de los próximos cuatro meses de precampaña y campaña electoral.

En este sentido, otro de los puntos fuertes de la estrategia de los populares, más allá de alcanzar la Junta en una comunidad casi siempre socialista, será "desmontar el mito" de Page como barón díscolo de Pedro Sánchez y lanzarse muy activamente a por todas con la idea de empezar en las autonómicas y municipales la nueva etapa de gobiernos del PP que se espera culminar en las elecciones generales con Feijóo en la Moncloa. La "foto azul" es fundamental. Que se consiga o no ya es otra historia y tendrá que ser contada en otra ocasión.