Los diarios de John Cheever
En la introducción a estos diarios monumentales, que sin embargo solo son una parte de los veintinueve cuadernos de hojas sueltas en los que estaban escritos, su hijo Benjamin H. Cheever explica cómo se gestó su edición por el que fuera su editor de confianza Robert Gottlieb. También habla de la determinación y la aprobación de su mujer e hijos de que vieran la luz a pesar de las reticencias que cualquier familia habría puesto a la publicación de unos escritos en los que desde el protagonista hasta la mayoría de las personas que desfilan por ellos no salen muy bien parados.
El mismo Benjamin relata una conversación y una escena con su padre que resulta muy significativa: “Una noche de enero me entregó un cuaderno y me dijo que le echara un vistazo.
Estábamos en el comedor. Me senté y empecé a leer el diario que me había entregado. Se sentó en otra silla para observarme. Me preguntó qué me parecía. Le dije que me parecía interesante y además muy bien escrito. Me dijo que siguiera leyendo. Al levantar la vista, vi que lloraba. No profería sollozos pero las lágrimas surcaban sus mejillas. No dije nada. Volví a la lectura. Cuando levanté la vista de nuevo, había recuperado la compostura.
Le dije que me gustaba.
Me dijo que, en su opinión, los diarios no debían publicarse antes de su muerte.
Estuve de acuerdo.
Añadió que la publicación de los diarios podría incomodar a la familia.
Dije que podíamos asimilar el golpe.”
John Cheever, que vivió siempre con su mujer, mantuvo múltiples relaciones amorosas o simplemente sexuales con hombres y mujeres a lo largo de su vida y sin embargo siempre mantuvo también su condición de creyente cristiano y practicante. En los diarios muchas de esas relaciones aparecen con toda crudeza y también su lucha interior con esa vida amorosa y el alcohol.
Sigue Benjamin H. Cheever: “Después recibí permiso para leer los diarios. Lo hice. No fue agradable. No mostraban al hombre ingenioso y encantador que me alojaba en la habitación de los huéspedes. El texto era deprimente y en ocasiones mezquino. Se hablaba mucho sobre homosexualidad.”
Más adelante: “Pocos conocían su bisexualidad. Muy pocos la frecuencia de sus infidelidades. Y casi nadie habría podido prever la aparente desesperación de su vida interior ni la naturaleza cáustica de su visión. Pero no creo que le preocupara mucho ser como los cereales del desayuno. Antes que desayuno era escritor. Era escritor casi antes que hombre.”
En 1982, pocos meses antes de morir se publica la última obra de John Cheever, ¡Oh, esto parece el paraíso! Y los críticos, conscientes de que le queda poco tiempo de vida son unánimes al elogiar la novela, como nos cuenta Rodrigo Fresán en la cronología que acompaña a estos diarios. Nunca antes se había reconocido de tal manera su obra. Lo que dicen los críticos nos da idea de lo que es toda su obra: "El mejor discípulo de Hawtorne y Melville y Fitzerald," "El Ovidio de Ossining," "El Chéjov de los suburbios," "Nuestro Trollope," "Kafka epifánico, "Un Thoreau o un Emerson de la modernidad," y, finalmente, por fin, "un Cheever solo se parece a Cheever”. A la hora de las definiciones de su carácter se lo considera “un escritor satírico,” “un puritano iluminado”, “un trascendentalista," “un anarquista episcopal”, “un moralista lujurioso”, “un anarquista suburbano”… en fin una multitud de definiciones para un escritor único y en el que su carácter original sobresale sobre cualquier otra característica.
La presente edición del citado Robert Gottlieb tiene la ventaja de unas amplias y documentadas notas completadas y actualizadas por Rodrigo Fresán, que van continuamente contrastando las entradas en el diario con lo que fue la vida del escritor y que nos ayudan a rehacer una biografía que ayudará a cualquier lector a entrar en el mundo literario y real de John Cheever.
John Cheever. Diarios. Edición a cargo de Robert Gottlieb. Introducción de Benjamin H. Cheever. Notas y cronología de Rodrigo Fresán. Traducción de Daniel Zadunaisky. Ed. Debolsillo. Punto de lectura, 2019, 496 páginas. 14,20€, eBook, 9,49€.