Los terneros de Dehesa El Milagro también son ecológicos al cien por cien y, por tanto, tienen derecho a parque cuando entran al cebadero, donde los machos y las hembras están separados. Son destetados con seis meses y el sacrificio les llega con entre 12 y 13 meses como máximo. En buena medida, el pienso que comen se produce con los cereales de la finca, que cuenta con molino propio. Cuando hay que utilizar cereales de otros productores, se envía una muestra al laboratorio para que certifique que, efectivamente, es cien por cien ecológico. Gustavo García explica que, además, ellos se encargan de la composición de los piensos buscando que la receta sea siempre exactamente la misma, para que la calidad y el sabor de la carne que llega a los clientes sea siempre igual de alta y reconocible.