Malestar entre parte del profesorado de Castilla-La Mancha por el borrador del "Manual de actuaciones para una escuela segura", que viene a ser una guía de primeros auxilios para atender a los alumnos en caso de accidente o emergencia, que este martes han presentado las consejerías de Sanidad y Educación en el Comité de Seguridad y Salud Laboral y en la Mesa Sectorial de Educación.
Dicho manual, según ha denunciado ANPE, incluye actuaciones que "exceden las funciones docentes", por lo que el sindicato educativo se ha mostrado "totalmente en contra" de que "exista una normativa en la que el profesorado sea el encargado de administrar medicación, inyectar adrenalina o realizar cualquier otra función que no sea inherente a su profesión".
Desde ANPE recuerdan que los maestros o profesores no están "ni cualificados ni capacitados" para llevar a cabo esas tareas, además de poder acarrearles "posibles consecuencias penales".
Enfermera escolar
Por ello, se suman a la histórica reivindicación del sindicato de enfermería SATSE y solicitan que los centros educativos de Castilla-La Mancha cuenten con la "figura de la enfermera o el enfermero escolar", ya que "solo los profesionales sanitarios están cualificados para medicar a nuestros alumnos y alumnas".
Para SATSE, la enfermera escolar sería "la profesional adecuada y necesaria en los centros educativos para actuar en casos de accidentes, proporcionar primeros auxilios, administrar medicación, inyectar o cualquier otra actuación del ámbito sanitario". Además, "también podría ayudar, asesorar y formar a docentes y familias en todas las cuestiones relacionadas con la prevención, la higiene, la salud y los hábitos saludables, entre otras actuaciones".