El Gobierno regional ha procedido a la realización de varias mejoras en el Museo de Paleontología de Castilla-La Mancha (MUPA), consistentes en la adquisición de nuevas maquetas de dinosaurios, y se han restaurado los desperfectos ocasionados por la borrasca ‘Celia’, que tuvo lugar el pasado mes de marzo.
La viceconsejera de Cultura y Deportes, Ana Muñoz, ha realizado durante esa semana una visita al MUPA para comprobar estas mejoras, que han consistido en la instalación en los jardines de tres nuevas maquetas de dinosaurios, que se suman a las 17 con las que ya contaba. Estas nuevas maquetas reproducen un nido de dinosaurios, donde se pueden ver tres crías de titanosaurio que ya han salido del huevo, otras dos crías que están asomando la cabeza y varios huevos por eclosionar.
Además, ha añadido, se ha incorporado una zona más lúdica con un ‘photocall’ con grandes huevos de dinosaurio, concretamente tres, donde el público puede hacerse divertidas fotos y que se ha convertido en una de las atracciones más visitadas durante esta Semana Santa pasada.
Mejoras en la cubierta
Igualmente, se han mejorado distintos aspectos en la cubierta del edificio y en la fuente ubicada en estos jardines. En esta última reforma se han sacado las letras de MUPA que había en su interior para instalarlas en la fachada del edificio y se han puesto tres grandes ammonites, recreando los océanos mesozoicos de la época de los dinosaurios. Próximamente, ha añadido, se van a realizar mejoras en la parte de la fachada que queda por arreglar.
Muñoz ha querido reiterar el compromiso del Gobierno de Castilla-La Mancha de seguir haciendo de los museos de la región “espacios cada vez más atractivos para el público” y ha recordado que el Paleontológico es la sala de exposiciones, dependiente de la Junta de Comunidades, que más visitas recibió durante el año 2021. Concretamente, 90.000 visitantes pasaron por sus instalaciones, batiendo récord desde su apertura.
Cabe destacar que, durante esta Semana Santa, se han registrado un total de 4.038 visitantes, lo que supone casi 1.000 visitantes más de los que había en el año anterior a la pandemia. Este incremento se produjo especialmente el Sábado Santo.