Por lo visto derrotar a Djokovic da hambre. Esto le ocurrió ayer a Kyrgios que después de asombrar el mundo del tenis con una exhibición ante el exnúmero 1 de la clasificación. En su partido de dobles con el serbio Zimonjic, decidió antes de empezar ir a ver lo que estaba comiendo un aficionado que estaba detrás de su banquillo. Cuando se acercó y comprobó que eran patata fritas, no se cortó y se puso a comer de las patatas del aficionado que no daba crédito a lo que estaba ocurriendo.
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