El Real Madrid sumó este martes un nuevo tropiezo en La Liga al ser goleado por el Girona en Montilivi. Es el undécimo que registran los blancos en lo que va de competición. Cinco empates y seis derrotas en 31 partidos disputados. Un balance malísimo para el cuadro de Ancelotti que llevaba desde la temporada 2018/2019 sin perder tantos encuentros. Y eso que todavía les restan por disputar siete fechas del campeonato.
El cuadro merengue en estos momentos acumula 65 puntos mientras que su máximo rival, el FC Barcelona, se sitúa con una amplia ventaja que supera holgadamente la decena y que podría darle un campeonato histórico. Los de Xavi se están jugando igualar el récord de puntos de La Liga y obtener la mayor diferencia con el segundo clasificado.
A pesar de que el Real Madrid tiene todavía la posibilidad de ganar dos títulos, Champions y Copa del Rey, y que ya acumula otros dos, Supercopa de Europa y Mundial de Clubes, el descalabro en La Liga ha enfadado de manera muy importante a buena parte de la afición merengue.
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Tanto es así que ahora se empiezan a depurar responsabilidades y se empiezan a buscar culpables de lo que ha sucedido en estas 31 jornadas que han desnudado las debilidades de un equipo que, una vez más, ha dejado de competir en Liga antes de tiempo. Y justo en el momento en el que Ancelotti decía que la diferencia entre el Barça y su equipo no era futbolísticamente tan grande como evidenciaba la clasificación. Ahora, lo necesario es saber qué le ha pasado al Real Madrid para tirar así La Liga.
El factor Benzema
Seguramente sea el principal problema que ha tenido el Real Madrid esta temporada. Casi no ha podido contar con Karim Benzema, actual Balón de Oro, Pichichi y mejor jugador del mundo. El galo ha pasado una temporada atormentado por las lesiones, las molestias y los golpes. Y cuando no ha tenido que estar de baja, su rendimiento ha sido más bien preocupante. Siempre alejado de su mejor nivel.
La intención de recuperarse para disputar el Mundial y vivir el calvario que vivió con la selección de Francia tampoco le han ayudado mucho. Karim ha disputado este curso 20 partidos de los 31 que ha jugado el equipo y solo ha marcado 14 goles además de haber repartido 3 asistencias.
Producir 17 goles en 20 encuentros no parecen malos datos. Sin embargo, quedarán lejos de los 27 goles y 12 asistencias que consiguió el curso pasado en los 32 partidos que disputó. Números que han provocado de manera alarmante que el vacío dejado por el delantero francés haya sido un muro demasiado difícil de escalar para el Real Madrid de Ancelotti este curso.
Malos resultados fuera de casa
El Real Madrid no ha hecho una buena temporada en Liga. Eso es una evidencia. Sin embargo, el principal hándicap que ha demostrado tener la escuadra de Carlo Ancelotti se ha manifestado fuera de casa. De los 65 puntos que ha sacado el conjunto blanco, 34 de ellos han sido en el Santiago Bernabéu en 15 partidos. Sin embargo, lejos de la capital, a pesar de haber disputado un encuentro más, 16, los blancos han conseguido tres puntos menos.
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El Real Madrid solo ha perdido un partido en casa esta temporada, el de hace unas semanas contra el Villarreal. Sin embargo, lejos del Santiago Bernabéu, el conjunto merengue ha cosechado hasta cinco derrotas. La última de ellas con esa dolorosa goleada frente al Girona con póker del delantero Taty Castellanos.
La diferencia de rendimiento entre casa y fuera es todavía más alarmante si se tiene en cuenta la producción ofensiva y defensiva del equipo. Con un partido más disputado, los blancos han anotado 29 goles a domicilio. En cambio, en el Bernabéu, han marcado un total de 36. Además, ante su afición, solo han encajado 12 mientras que fuera de casa han recibido 16. Una notable diferencia que va desde el +24 jugando de local hasta el +13 ejerciendo de visitante.
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Otro dato que confirma que el Real Madrid no se ha mostrado fuerte lejos de casa es que su mejor jugador esta temporada, Vinicius, solo ha conseguido meter tres goles lejos del Santiago Bernabéu de los 10 goles que ha conseguido. Un bagaje que ha dificultado que los de Ancelotti saquen todos los puntos que se esperaba de ellos.
Fragilidad defensiva
Una Liga no se pierde por uno o dos problemas. Al final, es una concatenación de circunstancias que llevan a un equipo a desengancharse de la pelea tal y como lo ha hecho este Real Madrid. Los de Ancelotti han conseguido enfadar a sus aficionados al ver que, una vez más, no han podido dar la talla durante 38 jornadas y que el FC Barcelona va a levantar el título casi sin competencia.
Mientras el FC Barcelona ha encajado solo 9 goles y va camino de establecer un récord sideral en la competición, el Real Madrid ha recibido más del triple. Concretamente, 28 tantos. Hasta el Atlético de Madrid del 'Cholo' Simeone ha tenido una mejor salud defensiva con solo 22 goles encajados.
Unos números que además se han producido a pesar del excelso rendimiento que ha vuelto a demostrar Thibaut Courtois. El portero belga no es el causante de la crisis defensiva que ha vivido el Real Madrid, ya que el guardameta ha vuelto a demostrar que es el mejor del mundo con amplia diferencia sobre el resto. Sin embargo, el bajón de jugadores como David Alaba o Dani Carvajal, las lesiones de Ferland Mendy o la difícil adaptación de Rüdiger y Tchouameni han provocado que el entramado defensivo del conjunto merengue se haya resentido de manera considerable.
Centrados en Champions y Copa
El Real Madrid vive una situación atípica para cualquier equipo, pero que viene siendo habitual para el conjunto blanco en las últimas décadas. Casi desahuciado en la pelea por La Liga, puede todavía cerrar la temporada de manera mágica. Está a cuatro partidos de hacer un doblete de leyenda. A tres de levantar la decimoquinta Champions y a solo uno de ganar una nueva Copa del Rey. En su camino, Manchester City y Milan o Inter en Europa, y Osasuna en la final nacional de Sevilla.
A la entidad madridista le ha perseguido históricamente esta crítica. Pero la presente temporada vuelve a demostrar esta circunstancia: pueden no pelear La Liga, pero sí ir a muerte por el título más complicado de la temporada. El Real Madrid vuelve a centrarse un curso más en la Champions, como demostró arrasando a Liverpool y Chelsea, pero naufraga en el campeonato nacional ante equipos como Villarreal o Girona. La realidad de un club con una mística especial en un año complicado, pero que puede terminar en fiesta.