Gareth Bale sigue sin carburar tras iniciar su aventura en la MLS. Llegó a Los Ángeles como absoluta estrella y no ha demostrado ese cartel de momento. Su mayor problema, el físico. Apenas ha contado como titular para su entrenador y sólo ha disputado un máximo de 62 minutos partiendo desde el once.
Un golpe anímico para un jugador que parece haber perdido toda su magia. Sus últimos años en el Madrid los vivió al fondo de la rotación. Y su desembarco para cumplir el sueño americano no está siendo el deseado. Un problema que le está evitando sumar minutos para su principal objetivo: el Mundial de Qatar.
Él mismo ha dado a conocer que la falta de forma física está lastrando su nueva experiencia. Un duro varapalo para uno de los jugadores más decisivos de la última década. "Todavía no he jugado los 90 minutos y trabajo para lograr ese objetivo", expresaba el galés en una entrevista en durante la concentración con su selección.
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"Creo que vamos por el buen camino. Por supuesto que quiero jugar los 90 minutos siempre, pero entiendo que necesito prepararme físicamente y eso es algo que no he hecho en las últimas temporadas", subrayó en un recado a su antiguo club, el Real Madrid. En las filas del club de Concha Espina vivió prácticamente los partidos con el chándal puesto.
El auge de futbolistas como Vinicius o Rodrygo en la delantera le abocó a permanecer en el banquillo más de lo deseado. Además, sus recurrentes lesiones en la espalda tampoco ayudaron a que pudiera integrarse en la disciplina blanca durante toda la temporada. Algo que echa de menos en su nuevo equipo.
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Plan específico
Según confirmó Bale, él y su equipo, Los Angeles FC, tienen un plan específico para si regreso. Un intento casi desesperado por volver a mostrar la calidad de sobre los terrenos de juego. Una confirmación de que todavía esperar a mostrar algo de ese nivel que encandilo al mundo.
"Tenemos un plan en LA, que es lo que estamos haciendo. Todo futbolista quiere jugar el máximo posible, pero estamos siendo inteligentes y poniéndome en forma para la parte más importante de la temporada", aseguró el delantero. Su intención de llegar en la mayor plenitud posible a la cita mundialista y al tramo final de la competición estadounidense.
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"Espero que esto me ponga en forma para la Copa del Mundo. Espero estar mucho mejor que ahora. Aún no he jugado 90 minutos, que es para lo que me estoy preparando", recalcó Bale durante la concentración. En ella su selección se enfrentará a Bélgica y Polonia.
"Lo más importante para mí es tomarme cada semana como venga. Espero que eso sea lo suficientemente bueno para ayudarme en mi equipo y estar listo para la Copa del Mundo", terminó Bale. Todavía tiene mucho trabajo por delante el ex del Real Madrid, la preparación física desempeñará un papel fundamental para alcanzar el nivel requerido para lucir tanto en el Mundial como con su equipo.