La carrera de Royston Drenthe se quedó en mucho menos de lo esperado. Pese a deslumbrar en sus primeros instantes con la camiseta del Real Madrid, su fútbol se fue apagando poco a poco. El neerlandés sigue disfrutando del balompié en los terrenos de juego tras firmar recientemente por el Racing Mérida.
Lo que parecía una meteórica progresión tras destacar en el Feyenoord y su posterior fichaje por el conjunto madridista hacía presagiar una espectacular trayectoria. Tras no hacerse hueco en los blancos, su periplo como jugador le llevó a visitar países como Inglaterra, Turquía, Emiratos Árabes, Rusia o Países Bajos, hasta llegar de nuevo a España de la mano de Morris Pagnielo.
Pese a que su paso por la capital de España no fue el esperado, Drenthe sigue recordando con cariño su paso por el club y lo ha dejado claro en una entrevista con la La Gazzetta dello Sport. En ella, el futbolista ha dado a conocer más detalles de su estancia en el Real Madrid.
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"Era 2007 y tenía 20 años, estaba en lo más alto de mi carrera. Una sensación de locura difícil de explicar, era un sueño entrar a un vestuario de galácticos. Son recuerdos que nunca olvidaré y siempre estarán en mi corazón", asegura el jugador durante la entrevista sobre su llegada a las filas madridistas en 2007.
Permaneció en el equipo durante tres temporadas para luego acabar saliendo cedido a Everton y Hércules, ese tiempo le permitió intimar con ciertos futbolistas de renombre dentro de la entidad como fue el caso de Raúl o de Guti. Con ellos, desarrolló una gran amistad.
"Raúl fue un ejemplo; Salgado era como un hermano y Guti era mi padre. Cuando tienes 20 años y nunca nadie te ha enseñado cómo actuar, se hace difícil aprender", explicó Drenthe, dando a conocer una faceta desconocida sobre su relación con ciertos pesos pesados dentro del vestuario.
Traspaso frustrado a un grande
Otra de las grandes revelaciones de Drenthe fue su no traspaso a uno de los grandes clubes europeos. El futbolista, que por aquel momento militaba en las filas del Hércules, recibió una oferta de la Juventus. Sin embargo, no consiguió que se hiciese realidad su desembarco en la Serie A.
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"Mientras estuve cedido en el Hércules, dejaron de pagar sueldos en diciembre. Pero estaba jugando bien y la Juventus me quería. El Madrid dio luz verde, el Hércules no. ¡El propietario quería un millón de euros y yo ni siquiera era su jugador! Por eso no fui al final", explicó sobre la fallida operación.
El problema de su carrera
Drenthe nunca llegó a alcanzar el listón que se suponía de él y las expectativas sobre su carrera se quedaron muy por debajo de lo esperado. Algo que él mismo reconoció en la entrevista y de lo que no tuvo reparos en hablar, dando su particular punto de vista.
"No estaba listo para ser un profesional. Pensé que era dios, pero también me gustaba la fiesta y para mantenerse en lo más alto no se pueden compatibilizar las dos cosas", concluyó en la entrevista.