Brasil ve con entusiasmo el crecimiento de una nueva futura estrella de su fútbol. Vitor Roque, de tan solo 17 años, viene llamando la atención en sudamérica. El gol que metió al Athletico Paranaense en la semifinal de la Copa Libertadores le ha puesto de forma definitiva en el foco. Hasta el momento lleva seis goles en 19 partidos, pero cada día que pasa deja más la sensación de ser algo más que un gran talento. El Real Madrid sigue su pista a través de Juni Calafat.
Este español que fue criado en el país del jogo bonito, en Sao Paulo, es quien controla el mercado de fichajes en Brasil. Llegó al Real Madrid en 2014 y desde entonces ha captado para el club blanco grandes talentos como Vinicius o Rodrygo. Los dos grandes talentos que vienen en el país campeón del mundo en cinco ocasiones son Endrick y este Vitor Roque. Ambos son motivo de trabajo para Calafat, que sigue de cerca sus evoluciones.
Vitor estaba en la órbita de otro exjugador blanco: Ronaldo Nazario. Comenzó su carrera profesional en el Cruzeiro, el equipo del que es propietario el delantero. Pero salió de allí de forma polémica. Ahora juega en el Athletico Paranaense y se está destapando como la próxima gran joya del fútbol brasileño. La realidad es que desde que salió de su club de formación, el América de Minas Gerais, ha estado rodeado de polémicas sobre los diferentes movimientos en los que ha estado involucrado.
Desde temprana edad el joven jugador mostró un talento diferente al de los demás. Tanto es así que, con 14 años, Cruzeiro salió a buscar al deportista en una polémica negociación. En una negociación en la que se involucró André Cury acordaron un traspaso, aunque esta operación no está autorizada por la FIFA. Es lo que llevó al América a denunciar al equipo de Belo Horizonte. En mayo de 2019, los clubes acordaron la división de derechos del jugador.
En el Cruzeiro le trataron como una estrella a pesar de ser un niño. Así el delantero recibió el año pasado su primera oportunidad profesional. A los 16 años, Vanderlei Luxemburgo le llamó para un partido en la Serie B brasileña. Su buen rendimiento, provocó que Athletico Paranaense también se lanzara a por esta figura: pagó más de cuatro millones y medio de euros para hacerse con sus servicios convirtiéndose en el jugador más caro de la historia del club.
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La idea del Athletico es hacer una operación como la que llevó a Bruno Guimarães al Olympique de Lyon por la que recibió 20 millones de euros. El delantero carioca está siendo una de las sensaciones y desde Valdebebas no quieren perderle de vista. El Real Madrid monitorizará todos sus pasos y evaluará si es un movimiento factible de cara a los próximos años. No corre prisa, pero los blancos no quieren que ningún otro club europeo se les adelante.
Los blancos acaban de fichar a Iker Bravo para el Real Madrid Castilla con la proyección de que llegue al primer equipo. Mientras, Vitor Roque se moldea a las órdenes de Luiz Felipe Scolari, un técnico que ha dirigido a varios de los mejores futbolistas brasileños de la historia. En sus goles ha mostrado un amplio repertorio. Pegada potente con la diestra, inteligencia para ocupar el lugar exacto en el área y un físico privilegiado.