Jude Bellingham (Reino Unido; 2003) se posiciona como la siguiente gran figura en el mercado de fichajes. El centrocampista, que este miércoles cumple 19 años, está llamando la atención de la mayoría de los clubes más importantes de Europa. El Real Madrid es uno de ellos y en el Santiago Bernabéu le señalan como una apuesta importante tanto de presente como de futuro.

El Borussia Dortmund, club que acostumbra a fichar barato y vender bien, sabe lo que tiene entre manos. Firmó a Bellingham en verano de 2020 por 25 millones de euros y ahora, solo dos años después, su valor casi se multiplica por cuatro: 80 'kilos', según el portal especializado Transfermarkt. Con contrato hasta 2025, no hay prisas para venderle.

Las puertas están cerradas este verano. Bellingham seguirá en Dortmund y lo sabe el Real Madrid, que ya ha hecho un esfuerzo este mercado para fichar a Aurélien Tchouaméni. Lo saben también en la Premier League. Los clubes ingleses aparecen como los grandes rivales del club blanco para un fichaje marcado para 2023 y que se disparará por encima de los 100 millones de euros.

Queda un año por delante, pero el ‘caso Bellingham’ se calienta en Europa. Es hora de posicionarse para el que puede ser el ‘bombazo’ del mercado de fichajes de 2023. El Real Madrid le quiere para completar su renovación del centro del campo y en Inglaterra todos quieren incorporar a un talento patrio especial. 

El Modric del futuro

El Madrid ve en Bellingham al reemplazo ideal para Luka Modric. Es el perfil que falta en ese plan de reclutamiento que en los últimos años ha llevado a Fede Valverde, Eduardo Camavinga y ahora Tchouaméni a vestir la camiseta blanca. 

En el club son consciente de la dificultad que supone armar un centro del campo que recoger el testigo de Modric, Kroos y Casemiro -la CMK-. La realidad es que la temporada 2022/2023 sea la última del tridente en el Madrid. Modric ha renovado un año y acabará el curso que viene con 37 casi 38 años y Kroos, cinco años menor, renunciar por ahora su vínculo que acaba en 12 meses a la espera de verse fuerte para seguir o colgar las botas.

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Esperar por Bellingham, además de los ya mencionados motivos, también se debe a la cuestión del cupo de extracomunitarios. El centrocampista inglés, desde que Reino Unido se saliera de la UE, ocupa uno de los tres huecos que permiten las normas. En el Madrid están completos actualmente por Vinicius, Rodrygo y Militao, habiendo frenado eso otras posibles operaciones como Gabriel Jesus. Pero el club espera que este asunto se solucione en los próximos meses y así abrir la puerta a Bellingham.

Las buenas relaciones con el Borussia Dortmund, que a diferencia del 'caso Haaland' no se verá atado por una cláusula de rescisión -Bellingham no tiene-, beneficia al Madrid. Toca convencer durante el año al centrocampista inglés de que lo mejor es elegir su propuesta por encima de las que tenga procedentes de su país. 

Confianza 'red' y millones 'blues'

La prensa inglesa ya pone a dos clubes de la Premier League como los grandes rivales del Real Madrid: Liverpool y Chelsea. Los reds, que hicieron un acercamiento para este verano, están vendiendo optimismo en su entorno respecto a Bellingham. Jürgen Klopp le quiere a toda costa y en Anfield creen que, en este caso, no irán a rebufo del club blanco como pasó durante el 'caso Mbappé' -que acabó con el desenlace que todos conocemos-.

El Chelsea se ha unido a la puja y cuenta con un buen margen presupuestario para atacar con fuerza por Bellingham el verano que viene. La baza de jugar en su país natal -aunque el equipo de su corazón sea el Birmingham- y la potencia económica de la Premier League -sin descartar a los dos clubes de Mánchester- juegan en contra de los intereses del Real Madrid.

Tocará trabajar duro este año y asumir que para fichar a Bellingham habrá que rascarse el bolsillo. Decir que el inglés no es el único centrocampista joven que se sigue. Gusta Florian Wirtz (19 años), que ha renovado con el Bayer Leverkusen tras sufrir el curso pasado una grave lesión, y Declan Rice (23 años) se mantiene en la órbita.