Zidane siempre habla de que el siguiente partido es el más importante, pero esta semana tendrá difícil asumir cuál es más importante de los dos encuentros que tiene por delante. Chelsea y Sevilla, Sevilla y Chelsea; sea como sea, los dos pondrán en juego la posibilidad de que el francés pueda sumar un nuevo doblete. El madridista sabe que, además, hay en juego varios futuros en función de lo que suceda en estos siete días.
El Real Madrid afronta los siete días más trascendentales del año para comenzar el mes de mayo donde puede acabar el domingo con una plaza en la final de la Champions League y el liderato del campeonato o cayendo de la máxima competición continental y quedando apeado de la lucha por el campeonato nacional. Todo o nada, una doble semifinal por ambos campeonatos en la que los blancos nadan a contracorriente teniendo en cuenta los resultados.
Todos los jugadores coinciden a la hora de pensar que la temporada se mide por lo que suceda en estos dos encuentros, primero el Chelsea este miércoles y el Sevilla el domingo. Frente a los ingleses se empató a uno en casa, por lo que todo pasa por marcar en Stamford Bridge. Ante los andaluces, aunque dependerá de lo que suceda también en el Camp Nou un día antes, están obligados a ganar para poder dar un golpe en la clasificación y colocarse líder.
Con el oxígeno justo para acabar el año futbolístico, Zinedine Zidane tiene en su mano ampliar su ya histórico legado en la entidad merengue. La plantilla está más que motivada; viendo las reacciones a los goles ante Osasuna es evidente que todos quieren poner la guinda a este 2021 levantando los dos títulos en lo que sería la continuidad del segundo ciclo ganador del francés. Para poder conseguirlo, el galo tiene varias claves a tener en cuenta.
El brujo
El técnico francés tendrá que volver a sacarse de la manga un nuevo recurso después de sacar a relucir en el último mes a Militao, la defensa de tres centrales o a Antonio Blanco. Todos estos ases que han surgido cuando nadie se lo esperaba son parte de la magia que el aficionado siempre destaca, a veces cómicamente y otras resaltando la capacidad del técnico para poner a los astros de su lado cuando lucha por los títulos.
El factor Hazard
Quizá el truco de Zidane tenga que ver con el belga, al que la afición merengue espera con más fe que convicción. Eden Hazard está dejando destellos de su mejoría en estos últimos tres partidos, pero el nivel por el que se le fichó todavía está lejos. Tendrá su primera oportunidad de demostrarlo en el estadio en el que mejor rindió en su carrera. Además, el peso de La Liga volverá a caer sobre sus espaldas en el Alfredo Di Stéfano el próximo domingo.
El gol
Sigue siendo la cuenta pendiente de este equipo que no ve en sus delanteros goles más allá de Karim Benzema. Más allá de esa aparición esperada de Hazard, Vinicius y Asensio también tienen que dar un paso adelante como hicieron en la ida frente al Liverpool. Zidane ha ampliado su abanico de posibilidades en el ataque, pero los tres tendrán su oportunidad en estos dos partidos para sacar adelante la temporada ayudando a los blancos a tener en bandeja los dos títulos.
Capitán Ramos
Será el gran regreso de estas semanas donde buscará dos nuevos títulos que amplíen su ya gran palmarés en el Real Madrid. Sergio Ramos estará disponible ante el Chelsea, aunque Zidane tendrá que estimar si lo hace como titular o suplente. Después de un 2021 prácticamente en el ostracismo por las diferentes lesiones que ha ido sufriendo, además de un rendimiento discreto cuando ha estado en el campo, el capitán merengue quiere ser partícipe de este final de temporada de ensueño.
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