Zinedine Zidane ya está convencido de cuál será su ataque para las grandes citas. Si las lesiones se lo permiten, una situación que no se había dado hasta ahora, Eden Hazard, Karim Benzema y Marco Asensio formarán el ataque deseado por el técnico del Real Madrid. Este martes ante el Inter de Milán en el Alfredo Di Stéfano debería ser la cita que confirme que el entrenador confía en estos tres jugadores para poner los goles durante esta temporada.

Los minutos ante el Borussia Monchengladbach y el partido ante el Huesca confirman que los merengues ya tienen tres siglas para identificar cuál será su ataque el resto del año. Cuando se pregunte por el gol, son tres los nombres que saldrán a la palestra para apuntalar a cada equipo que se cruce en el camino. El belga, el francés y el español tendrán en sus pies la responsabilidad de que el equipo vuelva a ser temible cada vez que nazca una jugada.

La última temporada fue la de la confirmación de un bloque defensivo esencial. Los merengues dejaron atrás la sensación de ser endebles a la hora de mirar hacia atrás partiendo del nacimiento de la figura de Courtois como el portero deseado, a Ramos y Varane como la pareja perfecta, el acierto del fichaje de Mendy y el trabajo del resto del equipo a la hora de ir a la presión. Zidane quiso modernizar a su equipo y lo consiguió: son capaces de defender a todo campo con sacrificio y entrega.

Ahora toca paliar la crisis del gol. Desde que se fue Cristiano Ronaldo, los blancos adolecen la falta de una referencia ofensiva. El título de Liga de la 2019/2020 se entiende a partir del buen trabajo colectivo, pero ahora el brujo de Marsella quiere añadir también el argumento de tener un ataque que preocupe a cualquier defensa. Esta será la tarea de Hazard, Benzema y Asensio, quienes en su primera prueba obtuvieron una nota alta. Ahora necesitan de una noche europea para confirmarse.

Sin lesiones

Cuando parecía que no íbamos a poder disfrutar de Hazard hasta después del parón, la recuperación del belga ha ido por el buen camino hasta estar completamente listo para poder disputar este martes el partido al completo contra el Inter de Milán. La prueba del Di Stéfano este fin de semana dejó más que convencido al entrenador francés. Acabar sin dolores y con ritmo de competición estresante, sobre todo en los 30 minutos de Alemania, fueron la prueba del algodón.

Pero no es el único que también tiene que dejar atrás la pesadilla de los problemas físicos. Marco Asensio adolecía en los primeros partidos tras regresar de ese percance en su rodilla una falta de confianza en sí mismo que le hacía menos temible. El jugador que es una amenaza desde fuera del área por su disparo, el que elimina rivales con el balón pegado y el que regala goles con su magia a sus compañeros no aparecía. De El Clásico a este último fin de semana ha ido dejando atisbos de ese jugador.

Goles

Karim Benzema fue el responsable de poner la puntilla a las jugadas elaboradas del conjunto blanco. Nunca fue un goleador, pero el francés se multiplicó la pasada temporada y mutó en '10', '9', '11' y lo que hiciera falta. Sin él no se entendería nada de lo conseguido tras la pandemia y, probablemente, durante el resto del año. A sus 32 años ha alcanzado su mejor fútbol y estar arropado por Asensio y Hazard solo parece indicar que puede llevar ese nivel, como mínimo, por el mismo camino.

La apuesta del Real Madrid para paliar esa crisis de gol que adolecía desde el comienzo de la temporada pasa por estos tres nombres. El belga ya dejó un gran gol, el delantero galo parece ir recuperando las sensaciones de la temporada pasada y el español poco a poco se va pareciendo al que conocíamos antes de su grave lesión. Si el coronavirus y las lesiones lo permiten, el madridismo tiene razones suficientes para creer en la magia de la HBA.

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