Neymar, jugador del PSG, recaló en el Barcelona en la temporada 2013/2014 por cinco años. El club tasó el traspaso en 57 millones de euros, pero posteriores investigaciones sobre la supuesta irregularidad del mismo arrojaron cifras más allá de los 130 millones totales por su traspaso.

Tras cuatro temporadas con la camiseta del Barcelona, Neymar jugó 123 partidos y anotó 68 goles antes de fichar por el PSG a cambio de 222 millones de euros, convirtiéndose así en el fichaje más caro de la historia.

Su periplo con la camiseta parisina no ha sido lo que Neymar esperaba. A las lesiones se ha sumado sus continuos roces con su entrenador y con su afición, lo que ha hecho que su futuro sea una incógnita y que vea con buenos ojos la posibilidad de salir de Francia. El Real Madrid siempre ha sido uno de esos equipos en hacerse con sus servicios con el Barcelona como competencia. 

Wagner Ribeiro, que ha participado en las operaciones de mercado de Neymar, Kaká o Robinho, ha reconocido que el Real Madrid sigue soñando con poder traer algún día a Neymar. 

"Recibí una oferta oficial de Chelsea cuando estuve en Nueva York, el día que Neymar debutó con la selección brasileña en 2010. Hicieron una oferta, la estudiamos, pero al final no decidimos nada. En aquella ocasión, como en otras, se la trasladamos al padre de Neymar y al propio jugador", explicó el agente en una entrevista al Canal do Nicola de la ESPN.

"Luego llegaron otras ofertas del Bayern Múnich, de la Juventus, con los que mantuve una reunión en Turín. El Real Madrid también me llamó varias veces, porque Florentino siempre soñó en fichar a Neymar. El año pasado estuve con él, en mayo, en su oficina, e incluso me dijo sigue soñando en fichar a Neymar. A Florentino le tengo mucho cariño y es una persona que dedica toda su vida al club y merece todo mi respeto. Él me dijo que aquí estaba muriendo mucha gente y que me cuidara. Tenemos una gran amistad y una gran relación", reveló Wagner Ribeiro.

Su posible adiós el año pasado

Wagner Ribeiro también fue preguntado la razón de por qué no se terminó haciendo ninguna operación con Neymar la temporada pasada: "Es debido a que no tenía un precio determinado. El PSG podía pedir 500 millones de euros, no había precio porque aún tenía un contrato largo. Pero para esta temporada ya tiene un precio fijo marcado por la FIFA, un valor porcentual a los 222 millones que se pagaron. Ahora Neymar cuesta 164 millones de euros".

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