La situación de Neymar en el PSG está llegando a su límite más negativo. Según informa el diario Sport, el hecho de que el brasileño no se haya vestido de corto durante la gira de pretemporada del equipo parisino por China está haciendo que el club no esté cumpliendo con los acuerdos comerciales fijados con el país asiático. El resultado de ello es un ambiente de gran tensión y, a su vez, que el descontento entre el club y el jugador continúe en incremento.

Además de quedarse fuera de las convocatorias, Neymar tampoco se ha molestado en viajar con el equipo para ver sus encuentros en directo y apenas ha participado en actos comerciales. Durante sus vacaciones, el delantero ha querido mantenerse al margen de todas las especulaciones de su situación en el PSG, pero la directiva del vigente campeón de la Ligue-1 está perdiendo su paciencia y la situación con el brasileño se ha convertido en insostenible.

Por otra parte, existe el 'pero' de la relación que mantienen Thomas Tuchel, entrenador del PSG, y el propio Neymar. Ambos mantienen una relación de respeto mutuo y profesionalidad, pero el entrenador también es consciente de su situación y quiere dejar cerrado el tema cuanto antes. De esta forma, el club sigue trabajando en su salida, y dado que el descontento con su actitud cada vez es mayor, su caso es una prioridad en las oficinas del PSG.

Operación difícil y delicada

A su vez, el jugador está ansioso por poner punto y final a su etapa en París y probar suerte en otra de las grandes ligas europeas. España es la opción que se le postula como más factible, donde sus principales opciones son volver al Barcelona o fichar por el Real Madrid. No obstante, su salida del PSG tampoco será nada sencilla, pues dado los constantes inconvenientes que se están produciendo en el camino, una mala gestión puede echar a perder toda la planificación deportiva del club.

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