Gareth Bale ha regresado al Real Madrid después de no superar las molestias que le impidieron jugar contra la selección española el pasado jueves. El combinado nacional dirigido por Luis Enrique pasó por encima de Gales en el primer partido del presente parón por los compromisos internacionales -amistoso-. El siguiente duelo de la selección galesa es contra Irlanda, pero Giggs tampoco podrá contar para este encuentro con la máxima estrella de su equipo.

El '11' del  Real Madrid, según el comunicado de Gales, no ha superado esa fatiga muscular que le hizo ser baja ante España. El propio Ryan Giggs ha insistido durante sus últimas comparecencias ante los medios de comunicación que confiaba en la recuperación de su jugador, cosa que finalmente ha sido imposible. Debido a esto, el propio Bale ha abandonado la concentración de su combinado nacional para poner rumbo a Madrid este mismo domingo por la tarde.

Está programado que este mismo lunes día 15 de octubre, el equipo blanco regrese a los entrenamientos en Valdebebas, después de tres días de descanso para los no internacionales. Julen Lopetegui irá recuperando efectivos en las próximas jornadas, ya que el próximo duelo de los merengues ante el Levante en La Liga -partido correspondiente a la jornada 9- está a la vuelta de la esquina, el próximo sábado día 20.

Bale, duda para el Levante

Es todavía una incógnita si Gareth Bale podrá estar disponible para el encuentro ante el conjunto granota. Después llega el partido de la Champions League contra el Viktoria Pilsen y luego El Clásico. El duelo ante el Barcelona en el Camp Nou del domingo 28 es el plato fuerte de este mes de octubre y el duelo que marcará el futuro inminente del equipo, por lo que lo planeado es que el futbolista galés pueda estar al cien por cien para la visita al feudo blaugrana.

Habrá que esperar a las pruebas médicas que se le hagan al extremo a su vuelta al club de Concha Espina para conocer el alcance de esas molestias que le vienen persiguiendo desde el derbi contra el Atlético de Madrid. Fue ante el conjunto rojiblanco donde pidió el cambio por primera vez. Después fue baja contra el CSKA y volvió a jugar en Liga contra el Alavés, partido en el que también fue sustituido al notar, otra vez, unas molestias.