No se puede estar ganando constantemente, y menos en una competición tan exigente como es la Euroliga. Eso es lo que le sucede al Real Madrid, que después de tantos meses avasallando en la máxima competición continental ahora atraviesa seguramente su momento más delicado en Europa. [Así vivimos la derrota del Real Madrid ante el Fenerbahce]
No es ni mucho menos alarmante y, de hecho, los blancos siguen mandando con claridad en la tabla, pero es cierto que no pudieron evitar su tercera derrota consecutiva en la Euroliga. Esta vez fue el Fenerbahce el que hizo besar la lona a los hombres de Chus Mateo y lo hizo además con todas las credenciales, con un partido muy completo que le sirvió para asaltar el WiZink Center.
Después de un arranque intenso y de mucha anotación, el Real Madrid se secó en ataque y eso propició la primera ventaja clara de los turcos al término del primer cuarto (15-20). El panorama se fue torciendo cada vez más con el paso de los minutos para los blancos, que se marcharon 10 puntos abajo al tiempo de descanso (33-43).
Había tiempo más que de sobra para que el Real Madrid intentara la remontada, una de esas que tanto le gusta hacer en Europa a este club, pero no iba a ser la noche. Hubo un amago, e incluso los blancos llegaron a acercarse a tan sólo 3 puntos en el tercer cuarto, pero cada intento de reacción fue inmediatamente sofocado por los visitantes.
El Fenerbache demostró tener una gran madurez bajo la batuta de Jasikevicius, que volvía a visitar España. Manejó a la perfección la situación en el tramo final con un gran trabajo coral e incluso llegó a gozar de la máxima renta ya en el último cuarto, algo que dejó un final de encuentro un tanto descafeinado.
Sin opción a la remontada
Las matemáticas decían que se medía un equipo, el Real Madrid, que hasta hacía unos días estaba invicto en casa en Europa, contra otro, el Fenerbahce, al que fuera de su feudo le costaba ganar. Pero como todo el mundo sabe, las estadísticas en el deporte están para romperlas.
Con Jaycee Carroll en la grada siguiendo atentamente el encuentro, el inicio fue puro vértigo anotador. Los ataques se impusieron a las defensas, y en el Real Madrid fue Walter Tavares el que llevó la voz cantante, pero de repente el ataque de los locales se secó y eso propició un estirón de los turcos.
Firmaron un 0-9 de parcial que les llevó a marcharse 5 puntos arriba al término del primer cuarto (15-20), y a partir de ahí las cosas comenzaron a torcerse para los hombres de Chus Mateo. Intentaron reducir la brecha desde el perímetro en el segundo cuarto, pero su 0 de 9 en los intentos triples al descanso lastraron demasiado las opciones de remontada.
De repente, el Real Madrid se vio en la obligación de tener que remontar 10 puntos de desventaja al descanso, y eso en un día en el que nadie estaba especialmente fino se convirtió en una montaña.
Los blancos salieron con mejor cara del vestuario, pero es que al Fenerbahce sí que le entraban los triples. Pese a que la distancia en el marcador se llegó a ver reducida a tan sólo tres puntos, las contestaciones de Sanli, Nigel Hayes-Davies y Tarik Biberovic desde el perímetro apagaron el fuego (58-67, min.30).
Lejos de pasar apuros, el Fenerbahce gestionó de forma espectacular el tramo final. De hecho, llegó a obtener la máxima renta del partido, así que cualquier opción de remontada quedó completamente descartada. El Real Madrid sigue mandando en la Euroliga aunque el Barça reduce las diferencias.
Real Madrid 79 - 89 Fenerbahce
Real Madrid: Campazzo (6), Llull (17), Hezonja (13), Yabusele (6), Tavares (14), -quinteto inicial-, Musa (13), Rodríguez (-), Poirier (8), Causeur (-) y Deck (2).
Fenerbahce: Calathes (12), Noua (2), Dorsey (5), Hayes-Davis (17), Sanli (7) -equipo inicial-, Papagiannis (4), Wilbekin (12), Sestina (2), Motley (10), Guduric (8), Biberovic (10), y Madar (-).
Árbitros: Damir Javor (Eslovenia), Mehdi Difallah (Francia) y Milivoje Jovcic (Serbia). Sin eliminados
Incidencias: Partido de la jornada 28 de la Euroliga disputado en el WiZink Center de Madrid ante 10.127 espectadores.