Una auténtica batalla la que han protagonizado el Real Madrid y el Olympiacos en el WiZink Center. Hasta Poirier perdió un diente en la cancha -y encima se acabó llevando la técnica por protestar-. Los griegos mandaron en el marcador hasta el descanso, pero los blancos pusieron una marcha más en los dos últimos cuartos para igualar el marcador al final. ¿El triunfo definitivo? Para los de Laso. [Narración y estadísticas: Real Madrid 75-67 Olympiacos]
Rudy Fernández y Sergio Llull fueron claves en el último tramo del partido. Se lucieron los veteranos para seguir marcando diferencias en 2022. Aunque el inicio del encuentro fue muy diferente. Tardaron los dos equipos en calentar muñecas. Pasados los tres primeros minutos del cuarto, el luminoso reflejaba un 3-2.
Fue Heurtel el que abrió la lata para los blancos. Y ahí se quedaron los de Pablo Laso. Pero aguantaron en el marcador gracias a la buena defensa de Tavares, con dos tapones incluidos en los primeros compases del encuentro. Ataques largos, pocas ideas y un Real Madrid que fue quedándose atrás en el marcador. Y pudo ser peor si no fuese por los dos triples de Heurtel.
Con cinco puntos abajo, el equipo merengue empezó el segundo acto sin dar con la respuesta. Sloukas fue así dejando su sello en la pintura y Olympiacos puso tierra de por medio en el luminoso. Sin soluciones en defensa y sin fortuna en ataque, Laso miró al banquillo para cambiar la dinámica. Sin embargo, esto tampoco resultó.
Remontada de época
Los griegos se fueron a vestuarios ganando por 16. Pero tras el descanso, el Real Madrid tiró de ADN para ir a por la duodécima victoria en el Palacio de los Deportes. El cambio de actitud se reflejó en el marcador. Dos minutos después de comenzar el tercer cuarto, la diferencia ya era de diez. A los cinco minutos, de ocho. Y así se fue reduciendo la distancia.
Aguantó Olympiacos el chaparrón, pero entre Yabusele, Llull y Heurtel redujeron la diferencia a tres. Se despertó el Real Madrid y también el WiZink Center. Todos a una a por la remontada. Los griegos lograron comenzar el último cuarto por delante gracias al buen hacer de Sloukas y Dorsey, pero tan solo por 50-51.
Fue en ese inicio de último cuarto cuando Causeur le dio al fin la ventaja a los suyos con un triple. Yabusele confirmó la remontada con un mate poco después. Olympiacos no había dicho su última palabra. Y entre eso, la efectividad blanca que no era la mejor y algunas polémicas decisiones arbitrales, el desenlace era completamente imprevisible.
A falta de cuatro minutos para el final, en el luminoso se veía un 62-62. Justo en ese momento llegó la técnica a Vincent Poirier. Castigo por protestar... después de que le sacasen un diente. Increíble, pero cierto. El Real Madrid entonces tiró de genio, de raza y de casta para olvidar el cansancio y con Rudy Fernández y Sergio Llull como protagonistas mantener el invicto en casa. Y, además, recuperando el average.
Real Madrid 75-67 Olympiacos
Real Madrid: Causeur (5), Abalde (2), Tavares (11), Yabusele (11) y Heurtel (20) -cinco inicial-, Williams-Goss (6), Randolph (1), Causeur (5), Rudy (8), Poirier (3) y Llull (8).
Olympiacos: Walkup (6), Dorsey (13), Fall (8), Vezenkov (16) y Papanikolaou -cinco inicial-, Sloukas (12), Martin (4), Jean-Charles (5) y McKissic (3).
Parciales: 10-15 | 14-23 | 26-13 | 25-16
Árbitros: Mehdi Difallah (FRA), Piotr Pastusiak (POL) y Saulius Racys (LIT). Sin eliminados.
Incidencias: Partido correspondiente a la vigésima cuarta jornada de la Euroliga disputado en el Palacio de Deportes (WiZink Center) de Madrid ante unos 5.000 aficionados.