La victoria se quedó en el Palau Blaugrana para que el Fútbol Club Barcelona acabase el partido como líder en solitario de la Euroliga. El Real Madrid de Baloncesto empezó mejor, pero entre Mirotic, Laprovittola y algunas decisiones polémicas de los árbitros acabaron diluyendo el buen comienzo para el triunfo definitivo del equipo culé. [Narración y estadísticas: FC Barcelona 93-80 Real Madrid]
Edy Tavares abrió el marcador a los 30 segundos de partidos con un tiro de dos en suspensión. La siguiente canasta también fue para el Real Madrid, con otro lanzamiento fácil de Sergio Llull. En los primeros compases del encuentro, Mirotic no aprovechó el poste bajo, ante la superioridad en estatura ante Yabusele y eso lo notó un Barça que tardó en anotar sus primeros puntos.
Incluso antes de que el Barcelona inaugurase su marcador, Hanga se llevó la ovación del Palau Blaugrana tras sufrir un duro golpe por el que los árbitros pararon el partido. Sin que los locales pudiesen anotar, el Real Madrid se fue a una diferencia de +6. Mirotic respondió con la primera canasta culé, pero Hanga respondió desde la línea de triple.
Siguió Nikola Mirotic siendo la única luz en el ataque azulgrana con dos nuevas canastas de tiro libre. Anotó y cogió rebotes para evitar que los de Pablo Laso se marchasen en el marcador desde el inicio. Pero llegado el ecuador del primer cuarto, los blancos ya se colocaron por delante con un 4-11. Sarunas Jasikevicius tiró de banquillo y metió en cancha al ex de la NBA Dante Exum.
Mirotic manda
El Barça fue de menos a más en el primer cuarto y se acercó en el marcador pasado el minuto 5. Presión desde los banquillos al árbitro y un Real Madrid que se iba cargando de faltas personales. Pero ahí apareció Causeur para presumir de muñeca y marcar de tres. No hay que olvidar que es el jugador merengue con mayor acierto desde el triple esta temporada.
Pero el equipo culé logró al fin empatar la contienda primero con una canasta de dos de Exum y después con un triple de Mirotic. De ahí a ponerse por delante con otra más para el montenegrino. El partido se acabó de romper al fin con un nuevo triple de Causeur. La emoción se notaba en un Palau entregado a su equipo y eso dio un empujón a los suyos, que acabaron dando la vuelta al luminoso para finalizar el primer cuarto dominando el marcador por 24-19.
Laso dio un golpe de efecto con la entrada de Heurtel. Cada vez que tocaba la pelota, pitada para él del Palau Blaugrana. Pero fue entrar a la pintura y adorar con su primer golpe al Barça. Pero los culés respondieron llevando la diferencia hasta el +10 y ahí Laso paró el partido. Tiempo muerto para romper la dinámica y, sobre todo, para evitar que el eterno rival se fuese en el marcador.
El Madrid estalla
El partido se fue calentando con algunas decisiones polémicas como una canasta que sacó Tavares y que los árbitros concedieron por creer que el caboverdiano tocó el aro. Pero el Palau acabó de estallar cuando Brandon Davies puso la ventaja en +12, lo que provocó un nuevo tiempo muerto del técnico madridista y una de sus ya tradicionales 'lasinas'.
El momento del Real Madrid se vio reflejado en los dos tiros libres fallados por Rudy Fernández. Algo prácticamente inédito. Y de ahí a que Sergio Llull errase una de sus famosas 'mandarinas'. Pero al fin Edy Tavares machacó el aro, justo en el momento en el que la afición culé gritaba "¡Independencia!". Y no fue el único que silenció al Palau, Rudy se redimió con un triple después para volver a llevar la diferencia a menos de diez puntos.
Las quejas continuaron en ambos banquillos por cada detalle, pero los árbitros decidieron castigar a Pablo Laso con una técnica que hizo que la tensión aumentase más tanto en el banquillo madridista como entre los jugadores blancos que estaban sobre la pista. Y todo para que el partido se fuese al descanso con un marcador que reflejaba un 51-42.
La ley del ex
El paso por vestuarios no cambió demasiado la dinámica del partido. Laprovittola hizo daño a su exequipo para llevar la ventaja del Barça hasta el +13 y continuó con su papel con un 2+1 que a punto estuvo de hacer saltar las alarmas porque pareció que la falta se le señaló a Tavares, para el que hubiese sido la cuarta, pero se la apuntaron a Causeur.
De un ex a otro. Si entre Mirotic y Laprovittola fueron castigando con sus canastas al Real Madrid, Heurtel fue también muy importante para mantener al Real Madrid en el partido. Primero con dos tiros libres y después con una espectacular asistencia para Tavares.
El Barcelona supo mantener las diferencias, llegando a ampliarlas hasta el +14. Pero el Real Madrid hizo de la defensa el mejor ataque con Hanga como actor principal. El ida y vuelta en el que se convirtió el encuentro a continuación no favoreció, en principio, a los blancos. Si Jokubaitis anotaba para el Barça, Williams-Goss firmaba un 2+1 para acabar el tercer cuarto con un marcador de 67-58.
En dos de los tres cuartos, el conjunto azulgrana se impuso en el marcador y con este balance se llegó al último cuarto. Con el Barcelona continuando con su dominio por momentos gracias a Mirotic o a Laprovittola. Más daño hizo una técnica pitada a Rudy Fernández, con el Palau insultando al balear por este motivo.
A falta de cinco minutos, el Barça sumaba un +10 que dejaba todo abierto para el final. Y fue así como Heurtel redujo las distancias hasta los ocho puntos para que Jasikevicius pidiese tiempo muerto. Un parón obligado, ya que este último cuarto se había convertido en el único en el que los blancos estaban por delante.
El luminoso se mantuvo con esa diferencia de diez puntos, aunque por cómo jaleaba el Palau Blaugrana parecería que fuese mucho mayor la distancia. Cuestión de sensaciones y es que mientras al Barcelona le salía todo, al Real Madrid le costaba mucho más de lo habitual. Y fue así como El Clásico de la Euroliga inclinó su balanza del lado azulgrana, con un Mirotic espectacular en el tramo decisivo y con un Barça saliendo más líder con su victoria ante el eterno rival por 93-80.