Un smartwatch —o una pulsera inteligente— puede ser el mejor acompañante para el teléfono móvil. No solo es capaz de avisar de las notificaciones y medir la actividad deportiva y el sueño, sino que muchos modelos en España también incluyen otras características, como el control multimedia o la medición de datos de la salud como el oxígeno en sangre o el estrés. Los hay incluso capaces de hacer electrocardiogramas.
Desde luego, son versátiles a más no poder, y eso los hace muy útiles, ya que, en muchos casos, incluso pueden sustituir al móvil a la hora de recibir y hacer llamadas, siempre que tengan 4G. Sin embargo, hay algunos modelos que no se caracterizan especialmente por contar con una buena autonomía.
Esto varía bastante según el sistema operativo que cada smartwatch utiliza, y mientras que hay algunos que pueden llegar a durar dos semanas, otros modelos necesitan cargarse diariamente. Dure lo que dure la batería, existen algunas acciones que pueden ayudar a que esta no se descargue tan rápido.
Cómo ahorrar batería
La mayoría de relojes inteligentes comparten algunas funciones y características comunes que hacen que algunos trucos se puedan aplicar en todo tipo de modelos por igual. Para ahorrar batería, por ejemplo, se pueden tomar ciertas medidas. La primera y más importante es desactivar la funcionalidad de pantalla siempre activa, y reducir el número de segundos que el panel permanece encendido después de que lo utilicemos.
Por otra parte, a la hora de medir variables como el ritmo cardíaco, el nivel de estrés o incluso la calidad del sueño, muchos modelos ofrecen la opción de llevar a cabo mediciones constantes para ofrecer una serie de datos más detallados. Desactivar este tipo de características que funcionan en segundo plano ayudará bastante a alargar la autonomía del reloj.
Lo mismo sucede con la función de levantar el reloj para activar su pantalla. Esto puede provocar que se encienda en momentos en los que no queremos que lo haga. De esta manera, solo se podrá activar su pantalla cursando sobre el botón habilitado para ello.
Como medida extrema para preservar lo máximo posible su autonomía, también se puede apagar el bluetooth del móvil para que no estén en constante comunicación. Hay que tener en cuenta que esto hará que no se puedan recibir ni las notificaciones ni las llamadas en el smartwatch, por lo que, en función de como se use el reloj, puede ser una buena opción o no. Cuando se vuelva a establecer la conexión, se sincronizarán los datos de la salud y el entrenamiento automáticamente.