Muchas veces os hemos hablado de cómo podéis limpiar un móvil a nivel de software, como eliminar apps que no sirven y liberar memoria, pero hoy vamos a darle un nuevo enfoque a la limpieza.
Los móviles son posiblemente los dispositivos que más usamos en el día a día. No hay nada que cojamos más veces y que más se pueda ensuciar.
Es por eso que os vamos a dar algunos consejos para limpiarlos y aunque no es necesario hacer esto a diario sí que es conveniente proceder con este ritual de vez en cuando.
Quita la funda y lávala o límpiala
La mayoría de los usuarios usa una funda en su móvil y eso es una buena decisión. No obstante, por muy buena que sea la funda, seguro que al cabo del tiempo algunas partículas de polvo o pelos se han ido colocando en el espacio que hay entre la misma y nuestro móvil.
Lo primero que hemos de hacer para limpiar el terminal es quitar la funda y limpiarla de lanera independiente o lavarla. Dependerá del material de la misma ya que si es de silicona podremos lavarla con jabón bajo el grifo pero si es de cuero pues deberemos tener más cuidado. Y si es de cristal incluso más.
Elimina los restos con un trapo
La primera parte de la limpieza del móvil es con un trapo suave, para eliminar los elementos que pueda haber en torno a la cámara o el lector de huellas.
Si la suciedad está muy incrustada podemos mojar ligeramente el trapo en agua. No es conveniente usar alcohol porque podría afectar al acabado del material pero si vamos a hacerlo mejor lo diluimos antes en agua.
Usa un cepillo de dientes o pinzas para los orificios
Los orificios de los terminales suelen ser sitios en los que quizás se acumule polvo e incluso alguna pelusa si no los usamos. Esto es más normal que pase en el jack de auriculares por ejemplo que en el cargador.
También es necesario levantar la pestaña de los puertos si nuestro móvil es de ese tipo aunque actualmente no es algo que se vea.
La pantalla se limpia con una gamuza
La última parte del ritual es para la pantalla. Podemos limpiarla con cualquier tela suave aunque lo ideal es usar unas gamuzas como las que usamos con las gafas, una tela muy suave que no araña.
Aseguraos de haber quitado antes el polvo con el trapo para poder apretar más con la gamuza y eliminar los restos de grasa y las huellas.
Os aconsejamos no usar productos químicos, sobre todo si vuestro móvil tiene una capa oleofóbica en la pantalla para alejar la grasa de los dedos.