La batería es uno de los componentes más propensos a sufrir desgaste con el paso del tiempo, por lo que es importante cuidarla bien, para intentar reducir o retrasar este desgaste. Un problema habitual es que las baterías empiecen a sufrir problemas, como que se descarguen demasiado rápido, lo que puede provocar que el usuario tenga que comprar un nuevo teléfono antes de lo pensado.
Aunque si hay un problema en este sentido, hay un aspecto a tener en cuenta, que es comprobar la garantía de la batería. Muchos fabricantes ofrecen una garantía, que supone que estamos protegidos en caso de problemas con la misma. ¿Cuál es la duración de esta garantía? ¿La ofrecen todos los fabricantes?
Garantía de la batería
Es habitual que un fabricante ofrezca garantía en la batería del teléfono, aunque en muchos países dicha garantía es inferior a la del propio dispositivo (que suele ser unos 24 meses). Esto puede ser un inconveniente en caso de averías en la misma, algo que no es raro que ocurra. La duración de dicha garantía puede variar entre marcas, además de entre países alrededor del mundo.
La situación dentro de la Unión Europea es diferente, ya que algunas marcas por ejemplo pueden decir que la garantía es de 6 o 12 meses para las baterías de sus teléfonos, mientras que las normativas de la Unión Europea en general o España en particular establecen que cualquier consumidor tiene que contar con dos años de garantía de cualquier producto que haya comprado. Es por eso que las baterías tienen esos dos años de garantía en todos los países de la Unión Europea.
De hecho, si consultamos los apartados referentes a la garantía en las páginas de los fabricantes, ni la batería ni el cargador del teléfono tienen apartados concretos separados o menciones especiales que eximan al fabricante o a la tienda donde se haya comprado de ofrecer dicha garantía de dos años. Además, tampoco se han diferencias entre baterías extraíbles o no extraíbles.
Lo que puede variar es quién es el responsable de la misma durante ese tiempo. Ya que normalmente el fabricante es el responsable en el primer año y la tienda en el segundo año. Habitualmente, si dicho tienes un problema con la batería de tu teléfono y este fallo se descubre en los primeros seis meses desde la compra, se da por supuesto que este fallo se debe a un defecto de fabricación o un fallo que ya estaba presente en el dispositivo en todo caso.
¿La garantía cubre todos los problemas?
La garantía de la batería cubre los problemas que hayan ocurrido sin que hayamos manipulado la misma o hayamos hecho un uso indebido de este componente. Si es un fallo que ha surgido de forma espontánea, posiblemente porque hay un fallo de fábrica en la misma, entonces el fabricante o la tienda serán los responsables y no tendremos que pagar nada por dicha reparación y sustitución de esta batería del teléfono.
Si se ha hecho un mal uso de la batería o se ha manipulado la misma, si el fabricante detecta esto, dicha garantía se pierde prácticamente de forma automática. Esto supone que dicha reparación no va a ser costeada por el fabricante, sino que tendremos que pagarla nosotros mismos de nuestro bolsillo, y teniendo en cuenta que la mayoría de teléfonos Android actuales usan baterías no extraíbles salvo contadas excepciones, la reparación puede ser cara. Así que es bueno evitar hacer un mal uso.
Por desgracia, un problema al que muchos consumidores se enfrentan habitualmente es que un fabricante o tienda ponga trabas para cubrir esta reparación, intentando alegar que el usuario ha hecho un mal uso de esta batería. Es una situación que ocurre, pero ante la que siempre es posible poner quejas en la Oficina del Consumidor, que pueden ser una ayuda para que se cumpla con la garantía de dos años que tiene la batería de tu teléfono.