Android está íntimamente ligado a los smartphones, pero Google ha ido expandiendo el sistema a casi cualquier cosa. De hecho, con Android Things es tal que así: los objetos conectados pueden tener Android. En algunos dispositivos es más práctico que en otros, como las televisiones: disponer de Android les abre la puerta a ser «smart» o inteligentes. Con las enormes posibilidades a la hora de reproducir contenido multimedia.
Dado que Android casa con la tele casi como un pastel de chocolate con la merienda, a Google se le ocurrió desarrollar una versión específica y adaptada: Android TV. Es casi el mismo sistema que podemos encontrarnos en un smartphone, pero posee una particularidad clave: la interfaz está adaptada al uso con mando a distancia. Parece una nimiedad, pero es lo que abre la puerta a una experiencia de uso plena.
Android TV se encuentra ahora mismo en Android 8 Oreo, pero solo el Nexus Player puede acceder a esa versión. Disponer de una tele con Android 7 o inferior no implica tenerla desactualizada: los reproductores y televisores que integran Android TV ofrecen una experiencia multimedia superior. De ahí que sea una recomendación clara y que, aprovechándose de ello, existan muchos reproductores haciéndose pasar por Android TV.
Google licencia Android TV a muy pocos dispositivos
Lo rimero que debes tener en cuenta si estás buscando un Android TV es que esta versión concreta de sistema solo se encuentra en un puñado de reproductores multimedia. También en televisores de Sony, Sharp y Phillips, aunque en estos ya viene integrado: antes de comprar tu propia tele debes informarte si, en el caso de que sea de estas marcas, viene con Android TV.
El caso es que tu tele no trae Android TV de serie pero quieres añadirle sus funcionalidades. No es ningún problema: basta con que tengas un conector libre HDMI y con comprar un reproductor Android TV. Aquí viene el problema ya que existen muchos dispositivos que se promocionan de esta manera, como Android TV, y luego no alcanzan una calidad mínima para arrojar una buena experiencia.
Como decíamos, Android TV está en unos dispositivos muy concretos, por lo que basta con elegir uno de ellos para incorporar el sistema al entretenimiento multimedia del hogar. Los dispositivos son los siguientes:
- Xiaomi Mi Box.
- Nvidia Shield TV.
- Razer Forge TV.
Son los tres reproductores multimedia licenciados por Google para incluir Android TV. Más allá de aquí solo te encontrarás con dispositivos con «Android corriente» en las entrañas. No tiene por qué ser malo ya que, si el hardware posee suficiente potencia, podrás reproducir contenido sin demasiado problema. Pero la interfaz no es tan cómoda y, además, puedes encontrarte inconvenientes con apps como Netflix.
Netflix solo permite la reproducción en alta calidad en los dispositivos licenciados. Android TV es compatible, pero si compras un reproductor con otro tipo de sistema quizá te encuentres con que solo puedes visualizar las películas y series en HD. También puedes tener problemas con HBO, por ejemplo.
¿Hay tanta diferencia entre un Android TV y un reproductor multimedia con Android?
Lo cierto es que sí. Dado que vas a utilizar el reproductor con la tele, lo mejor es que lo tengas 100 % adaptado a ella. Esto implica una interfaz con tarjetas y uso desde el mando a distancia; con control por voz y asistente integrados. Es realmente cómodo. Y no hace falta gastarse una fortuna: el Xiaomi Mi Box cuesta menos de 90 euros y ofrece una excelente calidad por su precio.
¿Estás buscando un Android TV y no quieres tener problemas? Desconfía del resto de dispositivos que no sean los que hemos reseñado, te ahorrarás más de un disgusto. Y si quieres confirmarlo, solo debes dirigirte a la página oficial de Google.