Han pasado ya 12 años desde que la famosa ‘Ley Sinde-Wert’, una de las más polémicas de la historia de Internet en España, entrase en vigor con la formación de la Sección Segunda de la Comisión de Propiedad Intelectual; un organismo gubernamental que tenía el poder de ordenar el bloqueo y cierre de páginas web sin la aprobación previa de un juez.
Pese al gran debate formado alrededor de esta ley y su constitucionalidad y legalidad en el marco europeo, en la práctica su efecto apenas se notó en la esfera pirata española. No fue hasta posteriores modificaciones de la ley que los usuarios piratas empezaron a notar dificultades para encontrar descargas de la última película.
Según el último Boletín de la Sección Segunda (pdf), que recoge el trabajo realizado durante el primer trimestre del 2024, la organización está muy cerca de alcanzar los 4.000 subdominios bloqueados o cerrados en España; en concreto, son 3.972 páginas que ofrecían contenido de música, libros y videojuegos, webs “muy dañinas” según el informe por el alto volumen de contenidos que ofrecían a los usuarios sin autorización de sus titulares.
Aunque la cifra de una cifra que puede parecer chocante, necesita algo de contexto. En realidad, el bloqueo de estos miles de subdominios es el resultado del bloqueo de sólo 848 dominios de Internet; el resultado de tramitar completamente 447 de las 909 solicitudes presentadas durante toda la historia de la Sección Segunda.
Una táctica muy común usada por los piratas consiste en la creación de subdominios para esquivar los bloqueos; en otras palabras, cambiar la dirección de la página, a veces con una simple letra o número, para que el bloqueo ya no resulte efectivo. Este ‘juego del gato y el ratón’, en el que los piratas cambian de dirección y la Sección Segunda la bloquea, es lo que ha resultado en esos miles de dominios bloqueados.
Otro detalle importante que resalta el informe es que, en realidad, la cantidad de dominios bloqueados ha bajado respecto al mismo trimestre de los dos años anteriores. Es muy probable que sea un síntoma de un cambio en las costumbres de los piratas, tanto de los usuarios como de los proveedores de contenido ilegal. En otras palabras, estamos hablando de cómo los piratas se han pasado a las IPTV, abandonando poco a poco las páginas de descargas, ya sea de manera directa o a través de torrent y otros protocolos P2P.
Es un cambio evidente en la lucha contra la piratería en el último año. En apenas 12 meses, se han producido una gran cantidad de arrestos y multas por ofrecer acceso a IPTV piratas, que retransmiten contenido sin licencia como partidos de fútbol, películas y series. Y para los usuarios, la posibilidad de que lleguen las multas por ver IPTV pirata sigue siendo muy real y perseguida por organizaciones de defensa de los derechos de autor; aunque por el momento, esta posibilidad no ha sido confirmada por el Gobierno.