Hace varios días el gigante tecnológico ofreció detalles sobre los errores cometidos para crear una IA 'racista' al generar imágenes de una mujer asiática al ser consultado Gemini por un 'soldado alemán de 1943'. Se ha levantado tal revuelo, que Sundar Pichai, CEO de Google, tuvo que enviar una carta interna a sus trabajadores.
La semana pasada Google tuvo que inhabilitar Gemini (su nueva IA ya disponible en Android) para que generarse imágenes de personas después de que se hicieran virales algunas de las respuestas que contenían un hombre negro al ser preguntado para que ilustrase un 'soldado alemán del 1943'.
En la carta redactada, Pichai avisa de que Google siempre se ha vinculado a una correcta precisión en los resultados de búsqueda a las consultas realizadas por millones de personas desde su buscador. El simple hecho de que una consulta a la IA dé como resultado una imagen incorrecta, podría dilapidar la fama de la empresa.
Aquí encaja perfectamente aquel refrán de que las prisas no son buenas consejeras, y desde que surgió la popularidad de ChatGPT de OpenAI, Google no ha cesado en acelerar todos los procesos para lanzar su alternativa; y más si cabe cuando ha estado desarrollando este tipo de tecnología desde hace tiempo.
Esas prisas por lanzar sus distintas alternativas y así acercarse a ChatGPT ha dado como resultado en unas imágenes generadas por IA que han supuesto un gran revuelo mediático con todo lo que supone. Y es que durante semanas, las imágenes generadas por Gemini han estado expandiéndose a través de las redes sociales para que al final se convirtieran en virales.
En la nota interna, Pichai indica que Google ha estado trabajando las 24 horas del día para solucionar los problemas dados, y para explicar que ninguna inteligencia artificial es perfecta. Una acción llevada a cabo por el CEO de Google para aliviar las tensiones de estos días; sobre todo en un momento donde varios actores están a las prisas para traer esas experiencias y así no dejar que OpenAI con ChatGPT se distancie demasiado.
Entre esos actores se encuentra Elon Musk con su propia IA, que no ha tardado en aprovechar el momento para criticar abiertamente a Google. Los intereses son bien importantes, y cualquier descalabro es la oportunidad para que las compañías lo aprovechen para así intentar auparse en esta carrera por la inteligencia artificial generativa.
Un descalabro bastante importante para los intereses de Google y que también envía un mensaje: la gran responsabilidad que significa desarrollar una tecnología que puede tener resultados inesperados, y más si cabe en un momento tan crucial como el que se está viviendo actualmente en el mundo.
Está en la mano de los gigantes tecnológicos está responsabilidad, y al menos, por las palabras de Pichai en su nota interna recogida por 9to5Google, da a entender que son perfectamente conscientes del mal uso que se le puede dar a la inteligencia artificial y como este tipo de imágenes son caldo de cultivo para cualquier tipo de conflicto en un mundo cada vez más polarizado.