Ya es evidente que Android Auto ha cambiado las reglas del juego. Los conductores ya no quieren los sistemas integrados de los fabricantes, sino una experiencia lo más cercana al móvil que usan a diario; esa es la razón por la que apps como Google Maps tienen tanto éxito en Android Auto.
Pero esa no tiene por qué ser la única opción. Hoy, dos de los grandes rivales de Google y sus apps han anunciado una alianza que puede convencernos para usar una IA en nuestros futuros viajes. Hablamos de TomTom y de Microsoft, que han anunciado la creación de un asistente basado en IA para coches.
El nombre de TomTom será familiar para muchos conductores, ya que durante años ha sido la referencia en GPS para el coche, ya sea con sistemas con pantalla o con apps para el móvil y los sistemas de infoentretenimiento. Por lo tanto, es el gran rival de Google Maps y el que más papeletas puede tener para atraer a los conductores frente a otras marcas.
Asistente para conducción
El sistema creado por TomTom y Microsoft se basa en la plataforma Azure OpenAI, y sí, eso significa que aprovechará la misma tecnología de ChatGPT; de hecho, a juzgar por la presentación, da la sensación de que el asistente es una mezcla de ChatGPT con los datos de TomTom, obtenidos durante décadas de desarrollo de GPS.
El resultado, según afirman sus creadores, es que los conductores podrán hablar de manera natural con su propio coche, con acceso a funciones y datos que normalmente están limitados a los GPS de TomTom. Por ejemplo, podremos pedirle que nos guíe a una localización específica o que encuentre tiendas a lo largo de la ruta que nos puedan interesar, organizando paradas a lo largo del recorrido; algo especialmente útil si vamos a hacer un viaje largo.
El asistente también tendrá acceso a las funciones del coche, y podremos pedirle que suba la temperatura del control climático, que baje las ventanillas, o que cambie la emisora de radio, todo sin necesidad de pulsar ni un botón. Estas funciones serán posibles porque la IA estará disponible para integrarse en los sistemas que los coches traen por defecto, además de en la plataforma Digital Cockpit de TomTom. En otras palabras, pretende ofrecernos motivos para no usar Android Auto y usar el sistema que viene ya en el coche; es algo por lo que apuestan fabricantes como GM, que alegan que usar Android Auto es peligroso y una distracción en comparación con el sistema del coche.