Elon Musk no es un ‘trol’ sólo en Twitter, también en la vida real. Al magnate le gusta llamar la atención con productos de esos que te hacen preguntarte por qué existen; por ejemplo, el lanzallamas de The Boring Company que lanzó sólo para promocionar su, por aquel entonces, nueva compañía.
[Por qué los Tesla son más baratos ahora, y por qué no deberías tirarte a por uno]
El dispositivo lanzado hoy por Tesla es parecido, en el sentido de que no tiene mucho que ver con el resto de productos de la marca; aunque es verdad que una relación lejana tiene. Se trata de un cargador inalámbrico que cuesta nada menos que 300 dólares, y no, no me he equivocado en la cantidad de ceros.
El cargador para móvil de Tesla
El Tesla Wireless Charging Platform parece haber nacido con dos objetivos: primero, ganar a Apple en su propio terreno y segundo, promocionar uno de sus coches. Para explicar lo primero, hay que recordar que uno de los grandes fracasos de Apple fue la AirPower, una base de carga inalámbrica que prometía ser capaz de recargar cualquier dispositivo de cualquier forma.
Normalmente, las bases de carga inalámbrica no tienen mucho margen; o pones el dispositivo justo donde está la bobina de carga, o no ocurrirá nada. Apple pretendía solucionar esto con un ambicioso sistema de bobinas múltiples que produjo muchos quebraderos de cabeza a los ingenieros por cuestiones como el calor generado, la fiabilidad y la seguridad. Todo eso obligó a Apple a cancelar la AirPower antes de su lanzamiento.
La base de carga de Tesla parece cumplir las promesas incumplidas de Apple. Posee 30 bobinas de carga superpuestas a lo largo de la superficie; son suficientes para cargar el móvil sin importar cómo lo pongamos, o al menos, esa es la teoría. Esto también significa que es compatible con todo tipo de dispositivos, como los estuches de carga de auriculares inalámbricos. No tenemos que molestarnos por ponerlos justo en la zona delimitada como ocurre con otros cargadores.
¿Cómo ha conseguido Tesla hacer lo que Apple no pudo? Pues cogiendo el trabajo de otros. Los primeros medios que han podido probar la base de carga han confirmado que se trata de una versión modificada de la Nomad Base Station Pro, que fue lanzada hace ya un par de años pero que no consiguió un gran éxito comercial por su elevado precio de 230 dólares.
Y aquí es donde llega el chiste: la base de carga de Tesla cuesta nada menos que 300 dólares, un precio absurdo se mire como se mire. La justificación está en que se trata de un producto para los más fanáticos de Tesla, ya que su diseño aparentemente está inspirado en el nuevo Cybertruck de Tesla; aunque sinceramente, la única parte que realmente se parece es el adaptador de corriente. Además, las primeras pruebas indican que el cargador tarda unos segundos en activarse cuando soltamos el móvil encima, y que se calienta más que un cargador inalámbrico convencional.
No vamos a juzgar a los que se compren este dispositivo, pero si lo haces, deberías saber muy bien qué es lo que estás comprando. Más que una revolución, es una curiosidad, aunque eso no quita que no sea interesante si ya has reservado tu Cybertruck y te sobra dinero para acompañarlo.