Google compró tecnología a Fossil para crear un smartwatch híbrido
A principios de 2019 Google compró una misteriosa tecnología a Fossil, marca que desarrolla todo tipo de relojes. Todo apunta a un smartwatch híbrido.
17 septiembre, 2019 07:32Hay una fecha marcada en el calendario para la división de hardware de Google: el próximo 15 de octubre. Justo ayer nos enterábamos de ella: el evento Made by Google tiene día de celebración, se hará en Nueva York y hasta posee streaming de YouTube ya reservado. Ahora bien: ¿serán los Google Pixel los únicos dispositivos presentados por la empresa? Podría ser que no.
En enero de 2019 una noticia despertaba nuestra curiosidad: Google adquiría una misteriosa tecnología a Fossil junto con el equipo que se encontraba detrás de ella. Dado que Fossil se dedica a la fabricación de relojes, y posee en cartera diversos modelos inteligentes con Wear OS, la lógica dictaba que Google pondría más empeño en su propio smartwatch. ¿De qué traba esa misteriosa tecnología? Hoy hemos conocido más detalles.
El equipo que Google compró a Fossil es especialista en desarrollar relojes híbridos: smartwatch y tradicional
Un reloj híbrido es un tipo de dispositivo que combina la tecnología tradicional de manecillas con los mecanismos y sensores de un smartwatch. De esta manera, se puede tener lo mejor de ambos mundos: control de la actividad desde la muñeca, notificaciones, Google Assistant… mientras la apariencia del reloj se mantiene como la de un reloj clásico. Además, este tipo de relojes híbridos suele tener una autonomía mayor.
Google no ha desistido de fabricar su propio Watch, por lo que la noticia, desvelada por el medio Wearable a pocos días del evento Made by Google, adquiere mucho sentido. Por un lado, sabemos que Wear OS está bastante abandonado, por lo que debería tener un empuje en forma de software y también de hardware; por el otro lado, los rumores de un reloj inteligente a lo Pixel vuelven con fuerza, por lo que no sería extraño verlo el próximo 15 de septiembre.
Fossil adquirió la empresa Misfit por 260 millones de dólares y, con ella, el equipo que desarrollaba relojes híbridos. A Google le interesó el proyecto, por lo que se hizo con el equipo adquiriéndoselo a Fossil por 40 millones.