La reciente continuación de la gama Note de Samsung, el Galaxy Note 7 ya ha sido muy comentado y se podría decir que ya todo el mundo debe saber de su existencia, Samsung se encarga bastante bien de eso cuando saca algo.
Hemos visto todo lo que tiene de bueno y malo, pero ¡quieto parado! Que no todo son rosas. También veíamos explotaba uno de estos dispositivos al cargarse hará una semana, pues bien, ha vuelto a ocurrir y no es el único problema al que se enfrenta Samsung.
Brillante como el sol… y explosivo como él
¡Wow! ¡1000 nits! ¡Esa pantalla debe brillar como el Sol mismo! Pues será tan brillante como el sol porque también tiene sus propias explosiones. Las que se han conocido y confirmado por parte de Samsung han dejado a la vista un terminal totalmente dañado, quemado y derretido.
Los dos casos confirmados por Samsung tienen algo en común y es que el problema se originó en el hardware que se encarga de cargar el dispositivo a través de cable pero se desconoce el problema exacto.
En ambos casos hay una cosa en común y es que ninguno usaba el cargador que viene en la caja del dispositivo, con el cual, debería funcionar perfecto. Pero no, esto no es escusa y es claramente un fallo que están tratando de solventar.
Pues ahora… me apetece bloquearme
No son los únicos problemas que está sufriendo el último gama alta de la compañía coreana, pues también hay veces, sin saberse todavía la razón, que el dispositivo entra en un bootloop, lo que quiere decir que nunca se enciende, sino se queda en la animación de encendido constantemente.
No es un fallo raro, pues los últimos gama alta de LG también tienen este problema en algunas unidades, pero no eso no quita a que sea un fallo que deja tu móvil de pisapapeles. Otros fallos de software se suman, como pantallas que dejan de mostrar bien el contenido o crasheos/bloqueos completos del teléfono «porque sí».
Mejores comprobaciones de calidad, que provocan retrasos
Entre los intentos para evitar estos problemas, Samsung ha empezado a mejorar las comprobaciones de calidad de los dispositivos recién fabricados para intentar cribar aquellos con estos problemas. En cambio, esto hará que los envíos de terminales se retrasen.
Este anuncio se hizo oficial por parte de la empresa, pero no se saben los problemas exactos, las mejoras del test de calidad ni que mercados son los afectados, pues al disponer de distintas plantas de montaje es posible que solo se vean afectadas las regiones a las que exporte una de ellas.
La causa puede residir en ser el primer terminal con USB Tipo C del fabricante que además incluye carga rápida, por lo que lleva poco tiempo y no cuenta con un pasado de pruebas tan largo como el del microUSB, De todas formas es algo que no puede permitirse de una compañía tan grande como Samsung y un terminal que cuesta más de 800€.
Samsung, sale mejor ir lento que querer correr demasiado. Y si por tu cuenta estás sufriendo algún problema con tu nuevo Samsung Galaxy Note 7 ve a la tienda donde lo compraste o contacta con ellos.