Como ya sabréis, este 2016 está también marcado por la llegada de nuevos procesadores: tenemos el Snapdragon 820 de Qualcomm, tenemos el Exynos 8890 de Samsung, tenemos el Kirin 950 de Huawei… en otras palabras, tenemos procesadores para todos los gustos y todas las necesidades, llamados por la nueva oleada de smartphones.
Esto hace que las comparaciones sean imposibles de evitar, por mucho que estemos cansados de ellas, y con los procesadores no hay excepción. Ya han sido muchas las comparaciones que han puesto a los nuevos procesadores a prueba, y la última en hacerlo ha sido AnTuTu, la conocida aplicación de Benchmarks que se renovó hace poco.
Como podéis ver en la imagen inferior, AnTuTu ha enfrentado los 10 procesadores más potentes de los que tienen constancia, dejándonos los datos en una cómoda tabla donde comparar el rendimiento de cada uno. Y los resultados son dignos de analizar, aunque el resultado de un benchmark también venga dado por el resto de componentes con los que va junto.
¿Cuales son los procesadores más potentes?
La primera posición es para Qualcomm con su Snapdragon 820, el cual consigue ponerse por encima de la competencia con 136.383 puntos. Justo detrás se encuentra el Apple A9 que estrenaron los nuevos iPhone 6S con casi 4.000 puntos menos, y en tercera posición se coloca el Exynos 8890 del recién estrenado Samsung Galaxy S7, perdiendo 6.500 puntos respecto a la cabeza.
Para encontrar diferencias más notables debemos salir de los tres primeros, y comenzar a mirar más abajo: el nuevo Kirin 950 se queda corto con 92.746 puntos, a la altura del Exynos 7420 implementado en el «viejo» Galaxy S6. A partir de ahí nos encontramos modelos de años pasados (Apple A8, Snapdragon 810), y modelos de gamas inferiores, con especial mención al rendimiento de la gama media-alta de Qualcomm.
¿Y el procesador gráfico más potente?
En AnTuTu han querido ir más allá, y también han comparado el rendimiento del chip gráfico llevado por cada procesador. El gran ganador es el Adreno 520 del Snapdragon 820 (55.098 puntos), seguido por el PowerVR GT7600 del Apple A9 (39.104 puntos) y el Mali-T880 MP12 del Exynos 8890 (37545 puntos).
Hay que decir que, como siempre ocurre con los benchmarks, todo depende del dispositivo que lleve las piezas, y de lo bien gestionadas que estén en el apartado del software. Un benchmark no nos sirve para saber si un dispositivo va a funcionar bien o mal, pero sí nos puede servir para saber de cuánta potencia hablamos. Dicho todo esto, ¿cuál os parece el ganador de esta nueva generación de procesadores?