Cuando viajamos, lo más habitual es llevar con nosotros nuestros smartphones, tablets, o portátiles: dispositivos electrónicos que nos ayudan a estar comunicados en un mundo cambiante y globalizado. Cualquiera lleva su smartphone cuando va a coger un avión, y muchas personas llevan su portátil, ya sea por cuestiones de trabajo o de placer.
Si habéis pasado por un control de seguridad en un aeropuerto en los últimos años, estaréis hasta las narices de que os hagan sacar todo lo electrónico del equipaje de mano. Que si saco el portátil, que si dejo los móviles, que si se me ha olvidado el libro electrónico y tengo que volver a pasar… ese tipo de cosas. Pues, si estabas cansado de ello, te traemos malas noticias, porque esa «pesadilla» va a ir a más.
ICAO prohíbe el transporte de baterías en las bodegas
La ICAO, Organización de la Aviación Civil Internacional, es una organización de las Naciones Unidas que investiga los problemas que genera la aviación civil en todo el mundo, además de promover reglamentos y normas de uso en todo el planeta.
El consejo permanente de esta organización, con sede en Canadá, ha tomado una decisión que nos afecta si teníamos pensado volar, y que han aprobado los 36 países miembros: a partir de ahora no se pueden transportar baterías de ion-litio en la carga de un avión.
Se espera que esta limitación, que se refiere a las baterías de ion-litio enviadas como carga en aviones de pasajeros, y no a las baterías que llevan los dispositivos del pasaje, se levante en 2018, cuando la ICAO cree un nuevo estándar de empaquetado de baterías de litio. Mientras, las baterías de ion-litio se unen al grupo de elementos que no pueden ir en el equipaje facturado de los aviones comerciales, dado que todas las aerolíneas están obligadas a cumplir con la medida. El veto no afecta, sin embargo, a las baterías que estén integradas o contenidas dentro de los equipos que hagan uso de ellas.
Esta prohibición llega a raíz de incidentes en vuelos que podrían tener su causa en el ion-litio, como un Boeing 747 de UPS que se estrelló en Dubai en 2010 a causa de un incendio provocado por estas baterías. La FAA, la Administración Federal para la Aviación estadounidense, llegó a la conclusión de que su transporte lleva más riesgos de los que creíamos, algo en lo que se ha apoyado la ICAO para tomar esta decisión, según El Confidencial.
Nada de móviles o portátiles en el equipaje facturado
A partir de ahora, no podemos llevar ni baterías sueltas en la maleta, ni dispositivos con estas baterías en su interior
Probablemente muchos os preguntaréis qué tiene que ver esta prohibición con llevar un portátil o un móvil en la maleta cuando cogemos un avión, y la respuesta es sencilla. Ese móvil, tablet, o portátil no recibe energía del aire, requiere baterías para funcionar sin depender de enchufes. Y, por lo general, el encargado de darle energía es una batería de ion-litio, el tipo de baterías sobre la que la ICAO ha levantado esta prohibición.
Esto significa que, a partir de ahora, no podemos llevar ni baterías sueltas en la maleta, ni dispositivos con estas baterías en su interior, debido al peligro que supone llevarlas en la bodega. Repetimos que esto no afecta al equipaje de mano, o a las baterías de los dispositivos que lleva el pasaje en cabina: la prohibición sólo se aplica al equipaje facturado, a los bultos que viajan en las bodegas del avión.
En todo caso, y hasta que se levante la prohibición en 2018 con el nuevo estándar de empaquetado, recuerda que no puedes dejar baterías o equipos con batería en la maleta que factures: o lo lleváis en el equipaje de mano, o lo dejáis en tierra.