Durante años, siempre he pensado que lo mejor de Android es todo el ecosistema que Google provee, mientras que por otro lado, el abuso de poder de dicho ecosistema me parece la mayor contradicción en la libertad que se supone que Android representa. Nosotros ya hemos vivido la experiencia de un Android sin Google, por lo que sabemos lo duro que resulta renunciar a todo lo que Google nos ofrece de forma gratuita, pero que no es imposible.
Ya en las primeras sensaciones de Marshmallow comentamos lo violento que resulta estrenar una nueva versión y encontrarnos con que prácticamente todas las aplicaciones son de Google cuando en el pasado perfectamente más de la mitad de las aplicaciones iniciales eran open source.
Pero no está bien juzgar a un libro por su portada, ya que trasteando por nuestra cuenta y con un poquito de ayuda de XDA Developers tenemos una serie de curiosidades de Marshmallow a la hora de deshacerse del tiránico control de Google sobre Android.
Deshabilitar las aplicaciones de Google ahora funciona correctamente
Las aplicaciones preinstaladas de Google normalmente son imposibles de desinstalar a menos que dispongamos de dispositivos con permisos root. Sin embargo, el sistema nos da la opción de deshabilitar estas aplicaciones desde el menú ajustes.
Una forma sencilla de llegar a la información de una aplicación es manteniéndola pulsada en el launcher, desde ahí podremos ir a ajustes de la aplicación arrastrando la misma hacia la zona superior izquierda que resaltamos. Otro modo es dirigirnos a Ajustes->Aplicaciones, y buscar la aplicación deseada.
Una vez lleguemos a la aplicación deseada, nos aparecerá un menú con una serie de acciones que podremos realizar en dicha aplicación.
A la hora de gestionar aplicaciones, las opciones más interesantes que nos podemos encontrar son la desinstalación/inhabilitación de aplicaciones, consultar su almacenamiento o gestionar sus permisos, una de las grandes novedades de Marshmallow (aunque hemos de mencionar que en las ROMs personalizadas llevan muchos años con nosotros, pero de forma oficial es algo nuevo)
Hasta aquí, todo es similar a las antiguas versiones de Android, pero en Marshmallow nos encontramos con una agradable sorpresa. Cuando deshabilitamos una aplicación en Marshmallow, esta dejará de ocupar espacio en nuestro dispositivo, llegando a ocupar 0 Bytes.
La aplicación será reinstalada cuando la rehabibilitemos, pero mientras esté deshabilitada, dejará de ocupar espacio en el dispositivo. Por tanto, en Android Marshmallow, sí es posible desinstalar las aplicaciones de Google sin rootear, aunque no sea tan sencillo como desinstalar cualquier otra aplicación.
No obstante, no será posible desinstalar todas las aplicaciones y servicios de Google al completo. Desde nuestra experiencia hemos conseguido desinstalar casi todas las aplicaciones de la gran G, existiendo unas pocas que se nos han acabado resistiendo. Estas aplicaciones han sido las siguientes:
- Google Experience Launcher
- Aplicación de Google
- Servicios de Google Play
Hasta este punto del artículo, seremos capaces de retirar las aplicaciones del paquete de Google que no nos interesan, quedando las básicas del ecosistema (si salvamos a Google Play), de todos modos, si sientes que la presencia de Google sigue siendo abusiva, te conviene seguir leyendo para saber como restar poder a las aplicaciones restantes.
Restringiendo los permisos a las aplicaciones de Google y sus divertidas contradicciones
Como hemos visto con anterioridad, existen algunas aplicaciones que simplemente no podemos desinstalar, pero por fortuna, las novedades de Marshmallow no se quedan en el poder deshabilitar aplicaciones y que estas dejen libre hasta el último byte disponible.
En efecto, una de las grandes novedades de Marshmallow es la gestión nativa de los permisos de la aplicación. Android es un sistema basado en Linux, y como tal, el acceso a los recursos del sistema es accedido mediante permisos. De forma simple, si a una aplicación no le permitimos usar la cámara, no podrá acceder a la cámara.
Uno de los mayores problemas con los que nos enfrentamos en Android, es que las aplicaciones maliciosas utilizan recursos que no deberían utilizar para robarnos información a la cual no deberían poder acceder.
En este grado, podemos incluir a cualquier entidad que realice software. En ocasiones, parece que las compañías quieren saberlo todo acerca nuestra, normalmente con objetivos como mejorar sus servicios, mientras que en otras ocasiones las intenciones no acaban resultando tan convincentes.
En este caso, la gestión de permisos es una herramienta maravillosa, ya que podemos juzgarnos del yugo de esas aplicaciones que acceden a recursos que no queremos compartir. Para gestionar los permisos de una aplicación podremos acceder directamente desde los ajustes de la aplicación, mientras que si queremos llegar a los ajustes generales de cada permiso, podremos llegar desde Ajustes->Aplicaciones->Engranaje de aplicaciones.
Y ya desde este menú podremos decidir que permiso puede tomar o no cada aplicación. Podremos verificar que la aplicación ya no accede a nuestros permisos simplemente realizando algún uso que requiera del permiso eliminado. Esto es tremendamente útil a la hora de utilizar aplicaciones en las que no confiamos, mientras que si pretendemos deshacernos de toda presencia de Google, es tan sencillo como retirar todos los permisos de las aplicaciones que no podemos desinstalar.
¿Qué trama Google?
En este pequeño tutorial hemos aprendido a deshacernos de todo el software de Google en dispositivos con Android Marshmallow sin necesidad de cambiar la ROM del dispositivo ni acceder a métodos que requieren del rooteo del dispositivo.
Realmente nos extraña que tras años donde la presencia de Google en Android es cada vez más fuerte, lleguen con un cambio a medias, donde podemos librarnos del dominio de la gran G, pero dificultando que los usuarios puedan acceder a los mismos. Personalmente, a nosotros no nos parece tanto una cesión del control de las libertades de los usuarios, sino un movimiento para librarse de las numerosas acusaciones por monopolio que está recibiendo el gigante de las búsquedas en su posición dominante en Android.
Quizás el punto más interesable y debatible sobre Marshmallow será si se avecinan cambios en las aplicaciones preinstaladas que nos ofrezcan los fabricantes. Si ya de por si nos gusta poco que Google nos cuele un gran número de aplicaciones que no ocupan precisamente poco espacio, menos gracia nos hace que el fabricante de turno añada aún más aplicaciones que nadie usa, por lo que inhabilitarlas despejando el espacio disponible nos parece un gran movimiento.
Hay múltiples motivos por los que Google pueda haber recurrido a este movimiento, aunque sea cual sea el principal, la consecuencia es beneficiosa para todos nosotros como usuarios. ¿Que creéis que trama Google con este movimiento?