Desde hace una década, primero en la era gobernada por los PC´s y ahora en la revolución de los smartphones, hay una firma de seguridad bien conocida por los usuarios de medio mundo: Kaspersky Lab. Sin embargo, la empresa moscovita no es en esta ocasión noticia por uno de sus habituales informes denunciando vulnerabilidades de Android, de Facebook o de cualquier otro rincón de internet. Dos exempleados de la compañía han acusado a la dirección de la misma de ordenar y ejecutar ataques selectivos contra la competencia.
Según estos analistas, estas acciones estuvieron dirigidas presuntamente contra AVG, Avast o Microsoft, entre una larga lista de competidores. El señor ‘X’ de toda esta trama podría ser, siempre según estas acusaciones que no han sido aún probadas, el propio fundador de la compañía Eugene Kaspersky.
‘Kasperskygate’: ¿una presunta respuesta a un presunto robo?
Este ‘tecnogurú’ habría podido sufrir el ‘síndrome de Steve Jobs’: considerar que la competencia le estaba robando sus creaciones. Si el fundador de Apple hubiese querido iniciar una guerra nuclear para acabar con Android -tal y como se cuenta en la biografía de Walter Isaacson-, Kaspersky habría tirado de sus propias herramientas para poner en entredicho la reputación de sus competidores.
«Eugene consideraba esto como un robo«, dicen los exempleados a la agencia Reuters. «Nuestra compañía nunca ha llevado ninguna campaña secreta para engañar a nuestros competidores», ha respondido la firma en un comunicado a dicha agencia de prensa, poniendo en duda la ética y la legalidad de estas prácticas. Por su parte, las empresas afectadas si dijeron en su momento que terceras personas habían tratado de inducir a falsos positivos a sus sistemas pero han evitado pronunciarse sobre estas acusaciones en concreto.
Analistas dedicados al ‘Kasperskygate’
Siguiendo con la denuncia, el ‘Kasperskygate’ no habría sido un tema menor. Los dos exempleados aseguran que algunos analistas de seguridad eran dedicados casi en exclusiva a los proyectos de sabotaje durante meses. «No sólo es perjudicial para una empresa rival, sino también para los equipos de los usuarios», afirmó uno de los denunciantes, que asegura que el beneficio económico también estaría detrás de estas supuestas acciones.
Según la información, la tarea a la que dedicaban el tiempo era que crear una plataforma inversa de detección de virus para que finlamente el resto de programas fallasen a la hora de marcar como maliciosos.
Vía | Reuters (Yahoo Tech)