Samsung quiere poner orden en su catálogo. Ya lo hizo con móviles y este cambio que, según explican en la compañía, persigue mandar una imagen más claro de los productos de la marca asiática al consumidor parece haber llegado ya a las tabletas.
Hoy hemos podido tener ya en nuestras manos la Samsung Galaxy Tab A, un dispositivo de gama media con el que la factoría asiática pretende imprimir mayor ritmo a sus ventas en este segmento. No en vano, indican en la filial española, que este mercado -el de los dispositivos algo más asquibles- mueve hasta el 45% de las ventas y siete cada diez que genera el mercado de las tabletas.
Samsung Galaxy Tab A, una apuesta clara por las diez pulgadas asequibles
En este caso han apostado por dotar a la Samsung Galaxy Tab A de una pantalla de 9,7 pulgadas. Sostienen los responsables de la compañía que en este rango de precios el usuario parece querer algo de este tamaño, en lugar de ocho pulgadas -donde se apuesta por opciones ‘premium’- o el de siete, un formato que parece encaminarse hacia la extinción.
De esta manera nos encontramos con un dispositivo asequible bastante bien construido y acorde con los precios con los que estamos hablando.El diseño apuesta por el plástico como ingrediente principal de su armazón pero incluyen un borde de acabado metálico en la parte frontal para imprimir un detalle diferente a la cara de la Galaxy Tab A.
Todos los botones así como la ranura para MicroSD se encuentran en el lado derecho y al utilizarlo con dos manos (no se me ocurre otra forma con estos tamaños de pantalla) el botón de desbloqueo como los de volumen están bien colocados para manejarlos cómodamente con el dedo índice.
Agarre y manejo cómodo, pero no excesivamente ligero
Los altavoces, al igual que el conector para los auriculares y el puerto de carga, se encuentran en la parte inferior (si lo tenemos en disposición vertical) o el lado derecho (en caso horizontal) algo que puede repercutir en la reproducción del sonido.
Si para ver un vídeo sujetamos horizontalmente el dispositivo con ambas manos, dependiendo nuestra forma de agarrarlo, podríamos acabar tapando alguno de los altavoces.
Respecto a las dimensiones, no es un aparato que se note raro en las manos. Es relativamente fino (7,5 milímetros) y su peso (456 gramos) no resulta incómodo aunque no destaque en este apartado.
Lo único que llama la atención es que igual se podían haber aprovechado algo mejor los marcos delanteros, reduciéndolos un poco para lograr una tableta grande de mejor agarre. La espalda del terminal, por su parte, recuerda bastante por su tacto a los Galaxy A.
La pantalla no parece su punto fuerte
Si tienes un móvil como el Galaxy S6, el HTC One M9 o cualquier otro gama alta, la pantalla te llamará la atención. Aunque estamos ante una tableta de gama media, lo cierto es que una resolución de 1024 x 768 píxeles se queda corta. Más aún teniendo en cuenta que estos dispositivos son utilizados en muchísimas ocasiones para consumir elementos multimedia.
Por lo demás, en este primer contacto, hemos podido comprobar que la pantalla sufre un poco en exteriores, en condiciones de mucha luz, con bastante reflejos. Un cambio importante también es la apuesta por el formato 4:3 en esta gama, que a mí personalmente me resulta idóneo para ver vídeos a pesar de las dos franjas negras que se suelen incluir con estos guarismos.
El S-Pen, un punto a favor
Sobre el S-Pen que incluye uno de los tres modelos que han comercializado (los tres con el tamaño de 9,7 pulgadas) decir que responde muy bien. Lo primero que hay que decir que su compartimento está bien integrado y ‘escondido’ en la parte superior derecha.
Y este lápiz responde bastante bien tanto a la escritura como al dibujo sobre la pantalla. Para poder activarlo, hay que colocarlo a unos dos centímetros del display, momento en el que aparecerá el circulo que nos indicará que podemos acceder, tocando el botón derecho, a los distintos modos de captura, escritura…
Aunque dentro de unos días os contaremos nuestras impresiones en profundidad en la review, teniendo en cuenta el precio de la Samsung Galaxy Tab A -desde 299 a 369 euros (modelo Wifi con S-Pen)— parece que puede ser una opción para aquellos que estéis planteando una tableta de media gama.
A vosotros, ¿que impresión os causa esta nueva tableta de Samsung?