Acaba de terminar el Mobile World Congress en Barcelona y nos hemos hinchado a ver novedades en el ámbito de la telefonía móvil. Sin embargo, debido sobre todo a nuevos teléfonos como el HTC One o la nueva gama Xperia de Sony e incluso nuevos sistemas como Firefox OS o los primeros vistazos en directo a Tizen, hay una cosa que ha pasado prácticamente desapercibida y que es bastante interesante.

Llevamos años viendo como todos los fabricantes de procesadores viven una encarnizada lucha por ofrecer el mejor producto y conseguir reventar con él el mercado. Primero fue simplemente la velocidad del procesador, después el chip gráfico, los núcleos, el escalado, las combinaciones de todas las anteriores y sin embargo, siempre acabamos llegando a un punto muerto en que todos ofrecen más o menos lo mismo.

No obstante, parece que por fin algo está cambiando al respecto. Los principales actores en esta función se han dado cuenta de que la clave parece ser la diferenciación. Hay que ir un paso más allá y que tu procesador no sea el más rápido, el que tiene más núcleos, mejor gráfica o un escalado menor (y por tanto menor consumo*) sino que además ofrezca algo más que no ofrezcan el resto.

Y claro, los fabricantes nos han permitido ver algunas cosas más que interesantes:

  • Quickcharge. Qualcomm pone a disposición de los fabricantes de dispositivos una tecnología que permite una reducción significativa del tiempo de carga. Esta característica depende, por supuesto, de otro hardware e incluso de los periféricos, por lo que en última instancia será el fabricante quien deba desmarcarse con ello, pero la opción estará ahí. Además no es tan descabellado en este caso, cuando esta opción ahora mismo solamente está disponible para la gama Snapdragon 800, con lo que al tratarse de gama alta, es bastante probable que en cuanto veamos los primeros dispositivos con estos SoC tengamos la ocasión de ver esta tecnología.
  • Activación por voz. Esta tecnología nos permite utilizar una palabra clave para reactivar el teléfono, pero tenerlo mientras tanto con el procesador apagado, con lo que conseguimos un ahorro considerable en consumo (siempre según el fabricante). Ya veremos qué tal funciona esto en la nueva gama de procesadores.
  • Nvidia Chimera. Esta tecnología de los californianos Nvidia nos permite, entre otras, disponer de un sistema de HDR en cualquier circunstancia y prácticamente instantánea. Además dispone de una gestión panorámica multidireccional (ya no estamos limitados a desplazamiento horizontal), con lo que podemos ampliar sobremanera las posibilidades de nuestras cámaras.
  • RF360. Este nombre no corresponde a una tecnología en sí, sino a una radio LTE compatible con 40 bandas diferentes, con lo que nos permite una cobertura en todas las redes del mundo de este tipo. Es decir, que tenemos una radio con cobertura mundial.
  • Direct Touch. Lleva ya un par de tardes entre nosotros (desde su aparición en los chips Tegra 3) y permite que los dispositivos equipados con estos procesadores (y los posteriores) puedan emplear esta tecnología para permitir una precisión significativamente mayor que la que ofrecen las propias pantallas capacitivas. De hecho, ha funcionado tan bien, que otros fabricantes como Qualcomm ya disponen también de su propia versión de esta tecnología.
  • WiDi. Y hablando de tecnologías que llevan un tiempo, los californianos de Intel presentaron esta tecnología como una oportunidad para que los ordenadores portátiles pudieran conectarse a pantallas externas sin necesidad de cables, pero por supuesto, esta tecnología ha estado disponible ya en su primera generación de procesadores y volverá a estarlo en los que están por venir.

Como veis, parece que se están empezando a tomar muy en serio todo este tema con las nuevas generaciones de sus procesadores y ese valor añadido que solamente ellos son capaces de ofrecer. No sé vosotros, pero yo estoy deseando que vaya avanzando este año y podamos ir viendo los dispositivos compatibles con estas impresionantes capacidades (y lo que queda por venir).

* El escalado en procesadores se refiere a la escala de tamaño de los transistores que componen el propio procesador, es decir, el tamaño de los mismos.