Desde la salida del Galaxy Note, que causó un cierto «revuelo» en el mercado de los Smartphones, no han sido pocas las compañías que se han lanzado a hacer estos teléfonos algo más dotados en cuanto a tamaño (de pantalla) se refiere. Cuando se rebasaron las 4″ de tamaño, ya se habló de que era excesivo, poco práctico e incómodo, pero curiosamente esa a sido la tendencia que se ha seguido.
5″, una tendencia a la alza
No solo se han sobrepasado esas 4″, sino que hemos llegado a las 5″ casi sin darnos cuenta. El Note marcó un punto de inflexión muy arriesgado, pero no podemos negar que las ventas y las buenas sensaciones de sus usuarios dejan claro que no era tanta locura; hace años la el objetivo era hacer cada vez los móviles más y más pequeños, pero ahora parece que vamos hacia el lado opuesto. Y si a eso le añadimos que además esas pantallas cada vez ofrecen una calidad mayor, siendo cada vez más habitual ver esos 1080p, la cosa se «complica».
Y para corroborar eso, Sharp ha salido a la palestra anunciando que se ve incapaz de abastecer la demanda de pantallas de 5″, que se ha visto obligada a retrasar los pedidos realizados en Taiwan y que no sabe cuándo podrá ponerse al día.
“Sharp is already behind on shipments for the panel due to high demand in the Taiwan market and it is unclear as to when Sharp will be able to catch up.”
Con esto vemos claramente que no es cuestión de unos pocos teléfonos de lo que estamos hablando, y todo indica a que este 2013 se presenta como un año donde veremos muchos nuevos dispositivos de estos tamaños. Pero Sharp no es el único que fabrica estos «displays», sino que hay otras empresas como JDI (alianza entre Sony, Hitachi y Toshiba), LG y, como no, Samsung. Los nuevos Xperia Z saldrán presumiblemente con los paneles fabricados por JDI, los futuros Galaxy S4, de la propia Samsung, y se prevé que LG muestre sus nuevas pantallas o en el CES o en el próximo MWC, así que tendremos que estar atentos.
No solo es aumentar el tamaño, sino que hay que mantener la calidad de los mismos para conseguir una resolución acorde a los tiempos que correr, ya que como hemos comentado al principio, esos 1080p se hacen cada vez más necesarios, y a parte de eso, hay que conseguir una densidad de pixeles suficiente para que la calidad final sea la mejor posible.
Es cierto que a primera vista teléfonos como el Note parecen una locura, pero hasta el momento todos los que conozco que tienen uno, dicen que no lo cambian por ningún otro más pequeño, que como todo, es acostumbrarse. No he tenido oportunidad de probar mucho tiempo un Note, pero cuando pasé de mi Nexus One al Galaxy Nexus, nada más abrir la caja pensé: «Dios, que grande». Ahora se me ha quedado casi pequeño.