Con la reciente preparación del HTC Hero a Eclair o versión 2.1 de Android, se va superando poco a poco uno de los grandes problemas de Android, la fragmentación por las distintas versiones, de esta manera estará un poco más cerca de finalizar, pero aún queda mucho camino por recorrer.
A pesar de que Froyo está cada vez más cerca y aún tenemos líos de fechas para saber cuándo se actualizará nuestro terminal, leo en Mashable los datos que confirman la versión 2.1 Eclair ya copa la mayoría del mercado de los terminales activos con Android.
Según datos de Google, Eclair ya dispone del 50% del mercado, mientras de 1.6 Donut se mantiene con un 25% y 1.5 Cupcake aún mantiene un 24,6% del mercado Android.
Personalmente, me parece un avance estupendo que la última versión esté tan extendida, pero no podemos olvidar que aún queda mucho para que la inmensa mayoría deje Cupcake y Donut, versiones que se resisten a ser olvidadas, con los problemas que ello conlleva.
Aunque hay algunos terminales, que por dejadez de los fabricantes o porque el móvil se concibío como un dispositivo cerrado y terminado, nunca lo harán, y no voy a mencionar ninguno. Probablemente sean los que se lanzaron con 1.5 (excepto magic y Hero y algún otro) que se quedarán ahí, y se convierta en una cifra marginal sumida en las más modernas versiones.
Espero que con la salida de tantos nuevos terminales el trozo de pastel para Eclair aumente mucho, pero que luego ese trozo sea una parte para Froyo, o la fragmentación dará muchos problemas a desarrolladores de apps y a usuarios, aunque ese problema puede estar cerca de ser finiquitado. Hace tiempo anunciábamos que Matías Duarte fichaba por Google para dar un empujón a Android en su interfaz gráfica y de uso, cosa que haría a los fabricantes pensarse mucho si merece la pena poner otra propietaria ( el real problema de la fragmentaciónm entre otros). Ya se dice que con la versión 3.0 empezaremos a ver esas mejoras.
Ni siquiera el iPhone está exento de la fragmentación, pero al menos en Android está claro que luchan con todas sus fuerzas para evitarla en la medida de lo posible, aunque todos sabemos que algún día nuestro móvil llegará al final de su vida, así es el mercado, y la vida.